El Gobierno dice que tiene recursos para acoger a los bebés abandonados

El padre Ángel García, de la ONG Mensajeros de la Paz, está convencido de que el sistema que existe para que las madres puedan entregar en adopción a sus hijos recién nacidos no es 'suficiente'. El sacerdote asegura que las mujeres temen ser descubiertas. Por ello, algunas terminan abandonándolos en los contenedores. Para evitarlo, el cura ha instalado dos cunas en una iglesia. Pero la Consejería de Servicios Sociales cree que esta medida es 'innecesaria'. 'Hay suficientes métodos de entrega', dicen. El Gobierno regional recibió el año pasado 60 niños para adopción y acogió a 89 bebés con sus ...

El padre Ángel García, de la ONG Mensajeros de la Paz, está convencido de que el sistema que existe para que las madres puedan entregar en adopción a sus hijos recién nacidos no es 'suficiente'. El sacerdote asegura que las mujeres temen ser descubiertas. Por ello, algunas terminan abandonándolos en los contenedores. Para evitarlo, el cura ha instalado dos cunas en una iglesia. Pero la Consejería de Servicios Sociales cree que esta medida es 'innecesaria'. 'Hay suficientes métodos de entrega', dicen. El Gobierno regional recibió el año pasado 60 niños para adopción y acogió a 89 bebés con sus madres.

El padre Ángel García, de Mensajeros por la Paz, ha instalado en la iglesia de María Reparadora, en la calle de Fomento, 13, dos cunas para que las mujeres que quieran dar a sus hijos en adopción puedan hacerlo. Este espacio de culto del Arzobispado está abierto 24 horas al día y está regentado por sacerdotes y una trabajadora social. El padre Ángel garantiza total discreción sobre la identidad de las mujeres que recurran a él: 'Rezamos para que estas cunas estén siempre vacías, pero si no es así garantizamos discreción. Lo que pretendemos es que ninguna mujer se vea obligada a dejar a su hijo en un contenedor de basura'.

De momento las cunas están vacías. 'Si nos llegara un niño lo que haríamos inmediatamente es llamar al Samur para que lo atendiera y, a continuación, a la Consejería de Servicios Sociales para que se encargara de su tutela. Es decir, los mismos trámites que se harían si en lugar de en una iglesia estuviéramos trabajando con el torno que había antes en los conventos'.

Inmigrantes sin papeles

En la semana que lleva abierto este sistema, y según los datos facilitados por Mensajeros por la Paz, 10 mujeres embarazadas se han interesado. 'Casi todas eran inmigrantes sin papeles que temen ser descubiertas si acuden a dar a luz a un centro hospitalario o que no pueden cuidar a sus hijos', señala el padre Ángel. 'Sabemos que Servicios Sociales tiene fórmulas de entrega, pero no parece que haya la información suficiente. Las mujeres desconfían de estos servicios públicos, porque temen ser descubiertas. Hace poco estuve con la consejera Pilar Martínez y me aseguró que las futuras madres no tienen nada que temer, pero lo cierto es que el miedo existe', añade.

El padre Ángel admite que a las mujeres que acudan hasta esta iglesia se las explicará que les ayudarán a criar a sus hijos, que la adopción no es la única vía. 'No creo que ellas quieran abandonar a sus hijos, pero a veces no tienen más remedio que hacerlo porque tienen que trabajar y no pueden cuidar a sus pequeños. Nosotros les explicamos que hay otras fórmulas. Sin ir más lejos, hemos abierto una casa-cuna en la calle del Amparo, 28, en la que ya hay 14 niños que están bajo nuestro cuidado, mientras sus madres acuden al trabajo.

Desde la Consejería de Servicios Sociales la medida adoptada por Mensajeros de la Paz se considera innecesaria. 'Cada portal de Madrid es en teoría un torno', dice un portavoz. 'Además, hay maneras de entregar a un bebé sin dejarlo abandonado en cualquier sitio y también centros en los que las madres puedan estar con sus hijos si deciden quedárselos'.

Según los datos facilitados por el Gobierno regional, la Dirección General de la Mujer, de la Consejería de Trabajo, posee suficientes residencias maternales y pisos tutelados. Así, en la Comunidad de Madrid hay una residencia maternal pública que atiende a jóvenes gestantes y a madres con hijos menores de dos años. Este centro cuenta con 60 plazas.

Además, existe un centro concertado que atiende a mujeres gestantes o madres con un hijo menor de dos años, con 38 plazas. El Gobierno regional, además, dispone de varios pisos tutelados, con capacidad máxima para tres mujeres cada uno, en donde pueden vivir con sus hijos. Según los datos oficiales, en lo que va de año 89 mujeres con pequeños a su cargo han sido atendidas en estos centros de la Comunidad de Madrid.

El padre Ángel García advierte de que las inmigrantes no se fían de las instituciones regentadas por las Administraciones. En cambio, Esperanza García, directora gerente del Instituto Madrileño del Menor y la Familia (IMMF) insiste en que hay suficientes recursos de apoyo para las madres y sus hijos. Además, se han establecido ayudas económicas para la escuela infantil y evitar la separación del niño y su madre. Estas ayudas, gestionadas por el IMMF, están 'encaminadas a evitar la institucionalización de los menores', por lo que se conceden con independencia de la situación legal de la madre.

La Comunidad también ofrece a las mujeres la guarda temporal del menor en una residencia del IMMF, pudiendo la madre visitar a su hijo incluso diariamente y con la posibilidad de tenerlo en su compañía durante los fines de semana o sólo sábados o sólo domingos, si es que carece de vivienda donde poder llevarlo.

García recuerda que existe la fórmula del acogimiento con familias seleccionadas por la entidad, en su modalidad de 'acogimiento simple'; es decir, con la posibilidad de recuperar al menor cuando desaparezcan los problemas que impiden a la madre hacerse cargo de su hijo. En esta situación, la madre puede visitarlo o tenerlo en su compañía el tiempo que ella pueda. En el acogimiento familiar permanente, el niño puede vivir con una familia, siendo visitado por su madre.