Kutxaespacio y Aranzadi harán un documental sobre las auroras boreales

La Sociedad de Ciencias Aranzadi y el Museo de la Ciencia de San Sebastián van a realizar un documental de televisión sobre las auroras boreales con el material obtenido por la expedición Aurora 2001 en Canadá entre el 10 de septiembre y el 10 de octubre pasados. El material se utilizará también para organizar una exposición temporal en el Kutxaespacio donostiarra y para elaborar un libro explicativo.

Los cinco expedicionarios, miembros de Aranzadi, montaron su campamento de observación a orillas del lago Marian, a 400 kilómetros al sur del Círculo Polar Ártico y a 70 kilómetros ...

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La Sociedad de Ciencias Aranzadi y el Museo de la Ciencia de San Sebastián van a realizar un documental de televisión sobre las auroras boreales con el material obtenido por la expedición Aurora 2001 en Canadá entre el 10 de septiembre y el 10 de octubre pasados. El material se utilizará también para organizar una exposición temporal en el Kutxaespacio donostiarra y para elaborar un libro explicativo.

Los cinco expedicionarios, miembros de Aranzadi, montaron su campamento de observación a orillas del lago Marian, a 400 kilómetros al sur del Círculo Polar Ártico y a 70 kilómetros al norte de Yellowknife. Allí recopilaron 18 horas de vídeo, unas 3.000 fotos y algunas horas de ruidos emitidos en radio.

Julia Gallego, una de las expedicionarias, calificó ayer de 'sobrecogedor' el espectáculo de luz y color que ofrecen las auroras, que se producen por el choque de partículas procedentes del Sol en la alta atmósfera. 'Son como una bombilla de luz fluorescente de 900 kilómetros de largo por 400 de alto y 100 de ancho', resaltó el director del Kutxaespacio, Félix Ares, para añadir que pueden consumir entre un billón y mil billones de vatios. Las auroras de color verde son las más comunes, mientras que las azules y rojizas son más difíciles de ver, según precisó Jon Teus, el fotógrafo del viaje polar.

Los expedicionarios no han logrado oír ni grabar sonido alguno, por lo que no pueden responder a la pregunta de si las auroras son audibles o no para el ser humano. Hay testigos que dicen que sí suenan, pero nadie sabe todavía si el sonido es real o inducido por los campos electromagnéticos, como ocurre en una resonancia.

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