Córcega recibe al ministro francés del Interior con un nuevo asesinato
Daniel Vaillant, ministro francés del Interior que acudía ayer a Córcega para preparar la discusión en el senado de la ley que amplía la autonomía insular, fue recibido con un nuevo asesinato. La víctima elegida fue el pastelero Nicolas Gros, un hombre de confianza de François Santoni, ex-líder nacionalista a su vez asesinado el pasado 17 de agosto.
Gross, de 32 años, acudía al puerto de Bonifacio pasadas las 6 de la mañana cuando fue sorprendido por los disparos de unos desconocidos. En 1996 había participado, junto con François Santoni, en unos atentados contra el golf de Sperone. San...
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Daniel Vaillant, ministro francés del Interior que acudía ayer a Córcega para preparar la discusión en el senado de la ley que amplía la autonomía insular, fue recibido con un nuevo asesinato. La víctima elegida fue el pastelero Nicolas Gros, un hombre de confianza de François Santoni, ex-líder nacionalista a su vez asesinado el pasado 17 de agosto.
Gross, de 32 años, acudía al puerto de Bonifacio pasadas las 6 de la mañana cuando fue sorprendido por los disparos de unos desconocidos. En 1996 había participado, junto con François Santoni, en unos atentados contra el golf de Sperone. Santoni fue condenado a cuatro años de cárcel y Gros, a dos, ambos por extorsión.
La coincidencia entre el viaje político de Vaillant y la muerte violenta de Gros, militante del grupo clandestino Armata Corsa, es susceptible de ser interpretada de muchas maneras, pero su resultado es indudable: debilitar aún más el proceso autonómico corso. La evidencia es que la respuesta legal ofrecida por el Gobierno Jospin, parcialmente asumida por la asamblea regional, no ha servido para detener la violencia en la isla.
Si bien es cierto que hay facciones del nacionalismo que desaprueban el llamado 'proceso de Matignon', son las conexiones criminales de ese nacionalismo o, más simplemente, algunas de las bandas que se camuflan tras reivindicaciones independentistas, las que pudieran explicar esa nueva muerte.