Los escolares inmigrantes aumentan un 40% en Madrid
La Comunidad de Madrid espera escolarizar a más de 53.000 inmigrantes este curso (un 39,5% más) frente a los 38.000 que había el pasado. Así lo anunció ayer el nuevo consejero de Educación, Carlos Mayor Oreja, quien reconoció que se produce un 'goteo continuo' de este tipo de alumnado una vez que finaliza el proceso ordinario de matriculación. 'Todas las semanas' aseguró, 'llegan a las comisiones de escolarización entre 170 y 200 alumnos. Somos capaces de escolarizarlos en una semana y debemos de seguir siendo capaces aunque se produzca una avalancha'.
Aún así, expresó su preocupación p...
La Comunidad de Madrid espera escolarizar a más de 53.000 inmigrantes este curso (un 39,5% más) frente a los 38.000 que había el pasado. Así lo anunció ayer el nuevo consejero de Educación, Carlos Mayor Oreja, quien reconoció que se produce un 'goteo continuo' de este tipo de alumnado una vez que finaliza el proceso ordinario de matriculación. 'Todas las semanas' aseguró, 'llegan a las comisiones de escolarización entre 170 y 200 alumnos. Somos capaces de escolarizarlos en una semana y debemos de seguir siendo capaces aunque se produzca una avalancha'.
Aún así, expresó su preocupación por el desequilibrio de este tipo de escolares en las dos redes que se financian con fondos públicos: la escuela concertada, que representa el 40% de la oferta educativa en Madrid y sólo escolariza al 28% de los niños inmigrantes, y la pública, que con el 60% de los alumnos escolariza al 72% de los inmigrantes. 'Estamos en el camino correcto y quebrando una tendencia', dijo Mayor. La razón: hace dos años los colegios concertados atendían sólo al 20% de los inmigrantes.
En este sentido, Mayor anunció que está elaborando un decreto autonómico para distribuir más equilibradamente a este alumnado. Según un reciente estudio de la universidad Complutense, la mitad de esos escolares tienen problemas de integración y de aprendizaje. La normativa establecerá una reserva de plaza para alumnos con necesidades de educación compensatoria (inmigrantes y chavales de familias marginales) en los centros públicos y concertados: tres vacantes en infantil y primaria y cuatro en secundaria. Una reserva que caducará cuando termine el plazo ordinario de matriculación.
El punto de la discordia
Pero Mayor mantendrá en esta nueva normativa autonómica la posibilidad de que los centros concertados puedan decidir, en parte, sobre la admisión de sus alumnos. Esa posibilidad, que se ejerce mediante un punto que otorgan los colegios a las solicitudes, fue resucitada por la ex ministra de Educación, Esperanza Aguirre, en 1997 cuando elaboró el polémico decreto para elección de centro por las familias. Este punto ha servido, según denuncian el PSOE e IU, para que los centros concertados 'seleccionen de forma encubierta' a su alumnado y remitan a los escolares más conflictivos a los centros públicos.
'En estos momentos el punto de libre disposición de los centros es más discriminatorio que nunca', dijo Adolofo Navarro, portavoz socialista en la Comisión de Educación de la Asamblea de Madrid.
Navarro exigió también que la reserva de plazas para este tipo de alumnado no caduque hasta finales de año. 'De lo contrario estaremos en la misma situación: los imigrantes llegan una vez que ha finalizado el proceso ordinario de matriculación y los centros concertados ya están llenos porque esta reserva se ha empleado para otro alumnado'.