Las 'Torres Gemelas' madrileñas
Estoy indignado al leer la carta del señor Vicenç Herrera, y aún más al comprobar que más del 60% de los españoles están de acuerdo con él. ¿A qué esperan los españoles? ¿Que esas Torres Gemelas de Madrid también se derrumben? ¿Que explote una bomba de ántrax en Barcelona? (¿Realmente sólo se encontraron vídeos en esos pisos francos, por cierto identificados por la CIA americana?).
Estoy sorprendido con gente como el señor Herrera, que critica tanto a los países anglosajones por ser los únicos que dan la cara. Empiezo a entender por qué Franco no fue derrocado, sino que murió de ...
Estoy indignado al leer la carta del señor Vicenç Herrera, y aún más al comprobar que más del 60% de los españoles están de acuerdo con él. ¿A qué esperan los españoles? ¿Que esas Torres Gemelas de Madrid también se derrumben? ¿Que explote una bomba de ántrax en Barcelona? (¿Realmente sólo se encontraron vídeos en esos pisos francos, por cierto identificados por la CIA americana?).
Estoy sorprendido con gente como el señor Herrera, que critica tanto a los países anglosajones por ser los únicos que dan la cara. Empiezo a entender por qué Franco no fue derrocado, sino que murió de vejez.
Los señores Herrera parecen desconocer el porqué del invento de la bomba atómica; convenientemente olvidan las matanzas y violaciones sistemáticas que los fascistas japoneses iban a seguir perpetrando por toda Asia si no es por esa bomba. Les recuerdo que Einstein asintió, que no era precisamente un hombre bélico.
¿O es que los españoles creen que asesinar a mujeres con un tiro en la nuca por sospechas de adulterio es una cultura que hay que respetar?
¿Tratar a mujeres como ganado, matar a miles de personas civiles e inocentes de todas las razas y religiones les parece cosa de ositos de peluche que merece su respeto?
La religión, los países y las culturas son un invento humano que sólo existe en cabezas, no son reales y no valen ni una sola vida. Sólo son excusas para enseñar a los hijos a odiar al vecino, creyéndose mejores por ser diferentes.
Lo único importante es la vida humana, y a los que amenazan con quitársela a todos hay que pararles los pies, cosa que deberíamos haber aprendido en el último siglo.