Reportaje:CULTURA Y ESPECTÁCULOS

EL DESENFADO DE McNAMARA Y FANGORIA TRIUNFA EN EL SOCARRAT

Antonio Vega, Nacho García Vega y Los Secretos pierden audiencia ante la arrolladora pegada de los conciertos de la carpa de La Boite

El Socarrat de Xàtiva evocó en su segunda jornada el espíritu y la música de los años ochenta. Los protagonistas fueron sin duda Fabio McNamara y Alaska que representaron una seria competencia para los grupos que tocaron en el escenario principal: Antonio Vega, su primo Nacho García Vega y Los Secretos. Sobre las 10 de la noche empezaba la marcha en La Boite con las actuaciones de Los Magnéticos y Ellos, grupos que desfilaron también por los escenarios del Festival Internacional de Música Independiente en Benicàssim a principios de agosto.

Los Magnéticos, una formación de Valencia, jugu...

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El Socarrat de Xàtiva evocó en su segunda jornada el espíritu y la música de los años ochenta. Los protagonistas fueron sin duda Fabio McNamara y Alaska que representaron una seria competencia para los grupos que tocaron en el escenario principal: Antonio Vega, su primo Nacho García Vega y Los Secretos. Sobre las 10 de la noche empezaba la marcha en La Boite con las actuaciones de Los Magnéticos y Ellos, grupos que desfilaron también por los escenarios del Festival Internacional de Música Independiente en Benicàssim a principios de agosto.

Los Magnéticos, una formación de Valencia, juguetones y divertidos, animaron al público no sólo con su repertorio. Tiraban confetti y pelotas al público, dejaban caer pompas de jabón, todo ello acompañado por amplificadores de cartón que se encendían y se apagaban en sintonía con su melodía. Cuando le tocó el turno a Fabio McNamara, La Boite estaba llenísima.

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McNamara se hizo popular desde su primeras actuaciones en los años ochenta junto a Pedro Almodóvar. Triunfaron en aquella época con un repertorio de canciones como Freak Show, Boggie Movie, La Coca, Mi Correo Electrónic...oh!

Tras él, salió al escenario la mítica Alaska, madrina del Socarrat. Su grupo Fangoria, se despidió con un tema cantado por Carlos Berlanga: Carne, huesos y tú, canción que se grabó con Alaska y Dinarama en el disco Deseo Carnal. Fue el punto redondo y final.

En el escenario Disco Inferno que sólo se limitó a la segunda jornada actuaron, entre otros, Alcohol Jazz y Phila. En medio de la actuación de estos últimos, se cortó el sonido, pero el público, comprensivo, les aplaudió. También desfiló Mastretta que impresionó con sus saxofones.

Entretanto, el chill out seguía con sus habituales problemas. En la primera jornada las actuaciones de los discjockeys se retrasaron dos horas porque había problemas con la corriente. Pero esto no era ningún problema para Sais, dj a quien le tocó abrir el viernes con su set. Incluso prefirió pinchar más tarde debido a las temperaturas infernales que se registraban por la tarde en Xàtiva. El dj Sais también se dejó ver en la representación del dúo Lethargy, compuesto por Mayte Cruz y Julio Tomé, el sábado. Esta vez no era protagonista sino que formaba parte del público que se movía con las mezclas de drum'n'bass y trip hop.

Menos público La organización del Socarrat esperaba unos 8.000 visitantes en la segunda jornada, pero se tuvo que conformar con algo más de 5.000. Habían llegado a Xàtiva, simplemente para pasárselo bien, cosa que se notaba al menos en la primera jornada, ya que muchos no sabían qué grupos estaban actuando ni que canción cantaban. En la segunda jornada el público parecía más enterado. Muchos acudieron al festival para ver a Los Magnéticos, McNamara y Fangoria. Como Oriol Molet y Pere Millet, dos barcelones de 21 y 22 años.

La organización del festival ya ha comenzado a pensar cómo se desarrollará la edición del año que viene. Aunque la idea es seguir fiel al proyecto inicial, que trata de apoyar a los grupos de pop nacionales; se plantea introducir innovaciones a partir de lo que han aprendido este verano. Pascual López, portavoz de la organización, señaló entre ellas la reestructuración de los escenarios, porque este año estaban muy cerca y los sonidos se entremezclaban.

La cantante Alaska, en un momento de su actuación.TANIA CASTRO

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