Sharon ordena una ofensiva contra los palestinos pese al alto el fuego de Arafat Los grupos radicales desafían a la Autoridad Palestina al anunciar que seguirán con la Intifada

El primer ministro de Israel, Ariel Sharon, ordenó ayer a su Ejército que lance una ofensiva militar contra los dirigentes de los movimientos integristas palestinos Hamás -que reivindicó el atentado del viernes en Tel Aviv, que causó 20 muertos- y Yihad Islámica. La decisión del Gobierno israelí se produjo poco después de que las 13 organizaciones palestinas que integran la Intifada decidiesen continuar la lucha contra Israel, en claro desafío al alto el fuego decretado por el líder de la Autoridad Palestina, Yasir Arafat, que queda así en una posición muy comprometida. Sharon no descarta exte...

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El primer ministro de Israel, Ariel Sharon, ordenó ayer a su Ejército que lance una ofensiva militar contra los dirigentes de los movimientos integristas palestinos Hamás -que reivindicó el atentado del viernes en Tel Aviv, que causó 20 muertos- y Yihad Islámica. La decisión del Gobierno israelí se produjo poco después de que las 13 organizaciones palestinas que integran la Intifada decidiesen continuar la lucha contra Israel, en claro desafío al alto el fuego decretado por el líder de la Autoridad Palestina, Yasir Arafat, que queda así en una posición muy comprometida. Sharon no descarta extender los ataques contra la propia Autoridad Palestina.

'No me fío de las declaraciones, sino de los actos. Arafat es el responsable de las operaciones de muerte cometidas por la Autoridad Palestina o por otras organizaciones afines', declaró ayer el primer ministro israelí tras visitar a los supervivientes del atentado de Tel Aviv. Sharon exigió a Arafat la detención inmediata de los líderes de grupos radicales.

Israel ha empezado a aplicar medidas de castigo indiscriminadas contra la población civil palestina, cuyas ciudades han vuelto a quedar sitiadas. Los palestinos no pueden desplazarse a sus puestos de trabajo en Israel, el aeropuerto internacional de Gaza ha sido cerrado y los puertos israelíes bloquean los productos de consumo destinados a la población palestina. A esto se suma el corte de suministro de petróleo y la congelación de fondos palestinos. Para humillar a Arafat, las autoridades israelíes le han impedido viajar a Gaza.

La situación del líder palestino es muy comprometida. Sus palabras no convencen ni a Sharon ni a su propia gente. El colectivo de grupos islámicos que dirigen la Intifada, que agrupa a 13 organizaciones, entre ellas el partido gubernamental, Al Fatah, decidieron continuar la lucha y reiterar el derecho del pueblo palestino 'a defenderse ante la agresión, ocupación y colonización' de Israel.

Estados Unidos y Rusia solicitaron ayer de forma conjunta a israelíes y palestinos que pongan fin a la violencia.

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