Arzalluz amaga con retirar al PNV de las elecciones si se ilegaliza EH
El PP exige a CiU que modere su participación en la campaña vasca
El dirigente nacionalista se mostró muy contrariado ante la mera posibilidad de que antes de los comicios se ilegalizara a EH, porque ello 'distorsionaría completamente el panorama electoral'. Arzalluz no quiso entrar en el fondo de las hipotéticas vinculaciones entre la formación abertzale y ETA, pero rechazó tajantemente que puedan emprenderse medidas legales contra EH antes de las elecciones autonómicas, que se celebrarán el 13 de mayo.
'Que lo hubieran hecho hace seis meses o dentro de seis meses con los procedimientos de rigor... pero así, por sorpresa y con nocturnidad y en...
El dirigente nacionalista se mostró muy contrariado ante la mera posibilidad de que antes de los comicios se ilegalizara a EH, porque ello 'distorsionaría completamente el panorama electoral'. Arzalluz no quiso entrar en el fondo de las hipotéticas vinculaciones entre la formación abertzale y ETA, pero rechazó tajantemente que puedan emprenderse medidas legales contra EH antes de las elecciones autonómicas, que se celebrarán el 13 de mayo.
'Que lo hubieran hecho hace seis meses o dentro de seis meses con los procedimientos de rigor... pero así, por sorpresa y con nocturnidad y en pleno periodo electoral no es aceptable', añadió el dirigente del PNV. 'Dejar fuera de la circulación a más del 15% del electorado no es aceptable democráticamente', remachó.
El PSOE y el Partido Popular reaccionaron de inmediato a las declaraciones de Arzalluz. El portavoz del PSOE en el Congreso, Jesús Caldera, restó credibilidad a las amenazas del PNV y las consideró una 'posición estética'. 'Arzalluz ha perdido completamente su crédito', afirmó Caldera, quien subrayó que no se cree que el PNV se plantee la posibilidad de no concurrir a las elecciones vascas.
El secretario general del PP, Javier Arenas, acusó a Arzalluz de querer 'condicionar la independencia de los jueces'. 'Estas declaraciones', dijo, 'son una amenaza al Estado de derecho' y recordó que hay que respetar todas las decisiones judiciales, 'gusten o no'.
El PP de Cataluña, por su parte, volvió a sugerir a Convergència i Unió (CiU) que se piense dos veces su participación en la campaña electoral vasca al lado de los nacionalistas. El presidente del PP catalán, Alberto Fernández Díaz, aceptó que CiU tiene derecho a implicarse en la campaña vasca, pero le exigió una actitud moderada.
'Hay que volver a recordar a CiU que es el PP, y no Arzalluz, quien le garantiza la gobernabilidad en Cataluña', indicó el dirigente conservador. CiU cuenta con 56 diputados en el Parlamento catalán y tiene en contra a toda la oposición de izquierdas, con lo que necesita los 12 votos del PP para llevar adelante todos sus proyectos.
El lunes, el secretario general de Convergència Democràtica (CDC) y conseller en cap del Gobierno catalán, Artur Mas, afirmó que el PNV puede contar 'sin lugar a dudas' con el apoyo de CiU y mostró la predisposición de la coalición nacionalista a acudir a cuantos actos les inviten. La campaña vasca puede situar en una misma tribuna, por tanto, a CiU y a Esquerra Republicana (ERC), porque esta formación mantiene una estrecha colaboración con Eusko Alkartasuna (EA), que se presenta en coalición con el PNV.
Alberto Fernández advirtió a CiU de que le conviene comportarse con moderación en la campaña y, de hecho, los primeros espadas de la coalición nacionalista no tienen previsto asistir a los actos de campaña para no irritar al PP.
El presidente regional popular afirmó que no tomará de momento ninguna represalia contra CiU en el Parlamento catalán, aunque su grupo parlamentario, dijo, 'actuará en consecuencia en función de cuál sea la implicación de CiU en la campaña'. 'Convergència debe ser consciente de que lo que está en juego en los comicios vascos no es la Declaración de Barcelona, sino la Declaración Universal de los Derechos Humanos'.