Esfuerzo mínimo
Los mercados de valores consiguieron mantener la recuperación iniciada el pasado viernes aunque, al menos en el caso del mercado español, con poco apoyo por parte del dinero. Son muchos los inversores que desconfían de la coyuntura económica y, sobre todo, de la respuesta de unos mercados en los que las pérdidas han forzado posiciones de extrema prudencia.
En la bolsa española la mayor parte del esfuezo corría a cargo de los tres principales valores, Telefónica, BBVA yBSCH, que suman más del 50% de la ponderación del Ibex 35. El resto, con algunas excepciones, tendía al equilibrio entre...
Los mercados de valores consiguieron mantener la recuperación iniciada el pasado viernes aunque, al menos en el caso del mercado español, con poco apoyo por parte del dinero. Son muchos los inversores que desconfían de la coyuntura económica y, sobre todo, de la respuesta de unos mercados en los que las pérdidas han forzado posiciones de extrema prudencia.
En la bolsa española la mayor parte del esfuezo corría a cargo de los tres principales valores, Telefónica, BBVA yBSCH, que suman más del 50% de la ponderación del Ibex 35. El resto, con algunas excepciones, tendía al equilibrio entre oferta y demanda, lo que pone de manifiesto esa desconfianza de los inversores que hace que sus preferencias se decanten por la liquidez que presta el mercado de futuros.
El Mercado Continuo negoció 281.495 millones de pesetas, 1.691.82 millones de euros, de los que casi una quinta parte procedía de un par de operaciones institucionales sobre acciones del BBVA y de ACESA.
El índice general de Madrid subió el 2,70% y el Ibex 35 el 2,87%, cifras que figuraban entra las más bajas de los grandes mercados europeos. París subía el 3,51%, Londres el 3,23% y Francfort un 3,62% poco antes de cerrar la sesión. En ese momento la Bolsa de Nueva York ganaba el 2% y el mercado Nasdaq un 1,3%. Los datos sobre venta de viviendas en los dos primeros meses del año, aunque muy confusos debido a las correcciones, pintaban un panorama más positivo para la economía estadounidense.
El mercado secundario de deuda tuvo un comportamiento atípico, con una brusca caida de los precios que hicieron subir la rentabilidad de la deuda a 19 años hasta el 4,98%, ocho décimas más que el viernes.