Entrevista:ANDRÉS NAGEL | ARTISTA

'Me cansa tener que defender que mi obra no busca la carcajada'

Andrés Nagel nació en San Sebastián en 1947. En 1972 terminó la carrera de Arquitectura, pero nunca ha llegado a ejercer en esa profesión. Ha dedicado su vida a la pintura y escultura. Su primera exposición individual data de 1968. Con la muestra inaugurada esta semana en Madrid, en la galería Marlborough, monográficamente centrada en el tema de los toros, las exposiciones individuales que acredita su currículo se acerca a las noventa. Nagel es uno de los artistas vascos con más proyección internacional.

Pregunta. ¿Por qué ha dedicado la exposición al mundo de los toros?

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Andrés Nagel nació en San Sebastián en 1947. En 1972 terminó la carrera de Arquitectura, pero nunca ha llegado a ejercer en esa profesión. Ha dedicado su vida a la pintura y escultura. Su primera exposición individual data de 1968. Con la muestra inaugurada esta semana en Madrid, en la galería Marlborough, monográficamente centrada en el tema de los toros, las exposiciones individuales que acredita su currículo se acerca a las noventa. Nagel es uno de los artistas vascos con más proyección internacional.

Pregunta. ¿Por qué ha dedicado la exposición al mundo de los toros?

Respuesta. Estaba con un cuadro de tema de toros, y entonces un amigo, muy aficionado a la fiesta de los toros, me calentó los sesos, animándome a que me extendiera en el tema.

'No hay nada en mis trabajos del mundo folclórico de los toros'

P. ¿Ha tenido que hacerse con vídeos de toros y con fotografías sobre ese tema?

R. No, no, no. Me gusta ver los toros y voy a las corridas. En San Sebastián suelo ir con Juan Mari Arzak.

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P. ¿Se puede decir que el tema de los toros es un puro pretexto para hacer arte?

R. Sí, exacto. Es un tema que me solucionaba unos problemas que tenía en relación con una escultura. Debía hacer unas esculturas y unos cuadros, por lo que apliqué y adapté el tema a esas esculturas y a esos cuadros.

P. Cuando conjuga la alternancia de personas y animales que entran y salen por las paredes, como si tal cosa, ¿con ello busca alcanzar una libertad que rompa con la lógica del espacio?

R. Cuando una cosa es demasiado lógica conviene que no lo sea demasiado. Un cuadro no tiene por qué ser una fotografía. En realidad no se trata de romper la lógica sino que lo haces por romper una imagen tan real.

P. Bastantes de sus esculturas están diseñadas a partir de una base y unos elementos verticales, y sobre estos elementos ahí sitúa determinadas figuras. Se crea de ese modo una especie de abismo y de vértigo. ¿Algo de esto puede ocurrir al introducir las figuras de la tauromaquia, toros y toreros en esos lugares altos? ¿Igualaremos vértigo y espacio abismal con el peligro implícito que anidan torero y toro?

R. La parte folclórica es lo que he evitado. El tratamiento del tema aquí es muy esquemático. Pienso yo que no hay nada en mis trabajos de lo que se pueda entender como elemento folclórico del mundo de los toros.

P. ¿Qué les dice a los que al hablar de sus trabajos aluden constantemente a la ironía y al humor sarcástico?

R. Que no estoy en absoluto de acuerdo con eso. Que quede claro.

P. ¿Insinúa que es usted la persona más seria del mundo?

R. No, no, no. En cualquier tema hay humor, hay drama, hay sentimentalismo, hay todo tipo de matices. Toma la historia del arte y vete paseándote, desde El Bosco hasta Klee. ¿El Bosco era un chiste? Pues no era un chiste y nadie lo toma por un chiste. Como no es un chiste todo el expresionismo alemán.

P. ¿Le molesta que hablen de las afinidades de su obra con el neoexpresionismo, surrealismo y el pop art?

R. Me parece una cosa tonta. No me preocupa lo más mínimo ninguna tendencia artística. Lo que me preocupa es hacer mi trabajo.

P. ¿Al exagerar lo representado en forma casi caricatural, lo hace para enganchar al espectador en un primer envite, para después guiarlo por caminos más enriquecidos, complejos y sutiles?

R. Digo lo mismo que cuando se haba de la ironía y el sarcasmo. Me parece que son simplismos. El arte es bueno o malo, te gusta o no te gusta.

P. ¿No le parece un simplismo esas concepciones de bueno o malo, te gusta o no te gusta?

R. Quiero decir que me cansa tener que estar defendiendo que mi obra no busca la carcajada del espectador como algo puramente esencial.

P. ¿En sus trabajos sobre la figura humana se hace presente el deterioro físico de las personas y la caducidad del cuerpo?

R. Tal vez ocurra eso cuando se trata de la representación de personas mayores.

P. ¿En su obra hay una voluntad expresa hacia lo quebrado? ¿Podíamos hablar de una propensión a la antiortogonalidad?

R. Yo funciono con un sistema orgánico. No creo que sea bueno en este oficio salir con normas. Tú lo que usas es algo que te sirve para solucionar un problema, no porque sea un fin en sí mismo.

P. ¿Confía más en las luces y las sombras que en el color?

R. Todo lo que te soluciona un problema lo utilizas. Y cuando no te lo soluciona, no lo utilizas.

P. ¿Conoce el libro El ojo, de Georges Bataille ?

R. No. Me hablaron ayer de él, precisamente, pero a partir de ahora estaré atento...

Andrés Nagel ante una de sus obras expuestas en la galería Marlborough de Madrid.JESÚS URIARTE

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