Cuatro artistas reflexionan sobre los problemas que plantea la abstracción
Todos ellos apuestan por formatos ambiciosos
El título de la muestra que presenta hasta el 14 de abril la galería Trayecto es lo suficientemente revelador. Abstract to II es la segunda de una serie de reflexiones que los responsables de la sala quieren ofrecer sobre el estado de esta corriente en la creación española. 'En el arte contemporáneo actual hay una clara tendencia hacia la abstracción que parte del informalismo y Tàpies y que domina los últimos cincuenta años', explica Fernando Illana, responsable de Trayecto, 'pero en los últimos tiempos se ha orientado esta tendencia artística hacia un compromiso; esto es lo que tratam...
El título de la muestra que presenta hasta el 14 de abril la galería Trayecto es lo suficientemente revelador. Abstract to II es la segunda de una serie de reflexiones que los responsables de la sala quieren ofrecer sobre el estado de esta corriente en la creación española. 'En el arte contemporáneo actual hay una clara tendencia hacia la abstracción que parte del informalismo y Tàpies y que domina los últimos cincuenta años', explica Fernando Illana, responsable de Trayecto, 'pero en los últimos tiempos se ha orientado esta tendencia artística hacia un compromiso; esto es lo que tratamos de analizar'.
En la primera exposición bajo la denominación Abstract to participaron creadores más comprometidos políticamente, desde posturas feministas o filosóficamente críticas. En esta ocasión, los artistas elegidos siguen esta última línea, pero desde un punto de vista menos explícito. Fernando Sinaga (Zaragoza, 1951) es quizás el más intimista, desde su minimalismo riguroso. 'Las obras de Sinaga tienen una vinculación con lo real, pero difieren rotundamente de las aportaciones de otros creadores, más cercanas a lo cotidiano o lo popular', aclara Illana.
De Sinaga se presentan las piezas La construcción de la esquina, un aluminio pintado, material que también se emplea en sus otras dos obras.
Manu Muniategiandikoetxea (Bergara, 1956) aporta referencias a la naturaleza urbana en sus dos grandes acrílicos sobre madera, pertenecientes a la serie Edificio, que abordan al visitante nada más acceder a la galeria.
Juegos ópticos
Desde otra sensibilidad, Néstor Sanmiguel (Zaragoza, 1949) ofrece su ironía personal con otras dos grandes piezas, tituladas El suicidio de Lucrecia 1. El estanque de los nenúfares y El río y las efímeras, que ponen en cuestión el problema de las apariencias, que tanta presencia tiene en la creación de estos últimos años.
Y Rufo Criado (Aranda de Duero, 1952), se decanta hacia las referencias al mundo matemático, a la estructura interna de los objetos. Construcción nº 23, Sueños posibles X y Tierra húmeda III son las tres aportaciones del artista burgalés.
La exposición se completaba, en principio, con las aportaciones del alavés Darío Urzay, quien, según Illana, 'completa la visión que hemos querido dar de los artistas de esa generación que practican la abstracción'. Al final no ha podido participar.