Una ordenanza prohibirá el ruido nocturno excesivo en Granada
El Ayuntamiento de Granada pondrá en marcha este fin de semana la nueva ordenanza municipal que prohíbe el cantar, armar jaleo o poner aparatos de música a volumen alto por la noche bajo pena de multa de hasta dos millones y medio de pesetas. Ésta es una de las medidas que la corporación piensa utilizar para paliar los efectos de la movida de los fines de semana.
La ordenanza, que fue aprobada en pleno municipal durante el pasado mes de diciembre, viene a ser una respuesta a diferentes colectivos ciudadanos afectados por la cantidad de ruidos que tienen que sorportar en distintas...
El Ayuntamiento de Granada pondrá en marcha este fin de semana la nueva ordenanza municipal que prohíbe el cantar, armar jaleo o poner aparatos de música a volumen alto por la noche bajo pena de multa de hasta dos millones y medio de pesetas. Ésta es una de las medidas que la corporación piensa utilizar para paliar los efectos de la movida de los fines de semana.
La ordenanza, que fue aprobada en pleno municipal durante el pasado mes de diciembre, viene a ser una respuesta a diferentes colectivos ciudadanos afectados por la cantidad de ruidos que tienen que sorportar en distintas zonas de la ciudad a causa de los botellones callejeros. A partir del fin de semana próximo no se permitirán los ruidos excesivos provocados por voces o aparatos de música que superen los 27 decibelios.
El horario de restricción de ruido se establecerá entre las 23.00 horas y las 7.00 horas. La norma afectará también a bares, discotecas y vehículos que superen las cantidades de ruido tolerables. Las multas más leves serán de 10.000 pesetas por infringir la ordenanza municipal, y las más graves pueden alcanzar los 2,5 millones de pesetas.
La ordenanza, denominada de Protección del Medio Acústico, cuenta con alegaciones por parte de asociaciones como la de Granada contra el ruido, y también del Partido Popular. La medida afecta de igual modo al interior de las viviendas, en donde tampoco podrá haber ruidos en las horas de descanso. Uno de los aspectos de la normativa se refiere a los animales domésticos, que no podrán estar en patios, balcones o terrazas en donde puedan perturbar el descanso de los vecinos.