Más de 60 muertos al reanudarse la guerra de Congo tras el asesinato de Kabila

Los enfrentamientos entre miembros de las etnias lendu y hema se produjeron cerca del aeropuerto de Bunia, a orillas del lago Alberto, en la frontera entre la República Democrática de Congo (RDC) y Uganda, cuyas tropas controlan la región y ayudan a los hemas. La guerra civil que azota el país desde hace dos años y que en algunos círculos recibe ya el nombre de primera guerra mundial africana se come el 80% de los recursos de Congo y ha sumido a la población en la miseria.

Lejos de esa zona, en Kinshasa, las banderas ondeaban a media asta mientras los países aliados de Kabila con...

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Los enfrentamientos entre miembros de las etnias lendu y hema se produjeron cerca del aeropuerto de Bunia, a orillas del lago Alberto, en la frontera entre la República Democrática de Congo (RDC) y Uganda, cuyas tropas controlan la región y ayudan a los hemas. La guerra civil que azota el país desde hace dos años y que en algunos círculos recibe ya el nombre de primera guerra mundial africana se come el 80% de los recursos de Congo y ha sumido a la población en la miseria.

Lejos de esa zona, en Kinshasa, las banderas ondeaban a media asta mientras los países aliados de Kabila confirmaban su apoyo a su hijo y sucesor. El presidente de Angola, José Eduardo dos Santos; el namibio, Sam Nujoma, y el de Zimbabue, Robert Mugabe, manifestaron ayer su voluntad de mantener sus tropas desplegadas en Congo para combatir a los rebeldes apoyados por Ruanda y Uganda.

La radio divulgaba música religiosa y cantos de un duelo que durará 30 días. Varios obreros se apresuraban ayer a montar una capilla ardiente en Lubumbashi, feudo de Kabila, al sureste del país, donde se oficiará una ceremonia privada antes de la que tendrá lugar el martes en Kinshasa, tras la repatriación del cadáver. Éste fue exhibido ayer en un cuartel militar de Harare (Zimbabue), adonde fue evacuado Kabila tras los tiros que le descerrajó un soldado el lunes. El presidente de Congo murió en el mismo avión, aunque el Gobierno de este país no confirmó hasta el jueves que había perecido. Zimbabue lo había anunciado ya el miércoles. Mugabe acudió acompañado de su Gobierno a rendir un homenaje a su antiguo aliado en el cuartel, donde no se permitió el acceso de extranjeros.

El gran desafío del hijo de Kabila, quien dirigía el Ejército desde 1998, será la guerra que empezó ese mismo año con el levantamiento de los líderes militares tutsis congoleños o banjamulengues, apoyados por Uganda y Ruanda, que acusaban a Kabila de corrupción y mala administración.

A punto de ser tomada Kinshasa por las milicias rebeldes, Angola, Zimbabue y Namibia desplegaron fuertes contingentes de tropas que impidieron el derrocamiento del Gobierno de Kabila y son hasta hoy las que han mantenido en pie su régimen. En la actualidad los grupos rebeldes controlan casi la mitad del territorio de la RDC en regiones del norte, centro y este del país. Por otra parte, el conflicto de Congo y la crisis en Costa de Marfil dominaron la cumbre francoafricana que ayer concluyó en Yaundé. El presidente francés, Jacques Chirac, declaró ayer que los 'asesinatos políticos no pueden ser justificados por nada' y que 'sólo el diálogo y la democracia' pueden evitar las crisis en Africa.

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