80 extranjeros seguirán encerrados en Lorca hasta que se les regularice
El servicio local de Protección Civil prestó las primeras atenciones y entregó alimentos. Está previsto que hoy se una la Cruz Roja a petición de los propios manifestantes. El párroco de la iglesia de San Mateo y vicario episcopal de Lorca, José Carrasco Pellicer, sólo puso dos condiciones para prestar los locales sociales de su iglesia al colectivo de inmigrantes: que en el salón sólo permanecieran los extranjeros, sin la presencia de españoles, y que no masificaran en exceso las dependencias. 'Yo no les he dejado el salón a los sindicatos ni partidos. Que sean ellos los que decidan lo que qu...
El servicio local de Protección Civil prestó las primeras atenciones y entregó alimentos. Está previsto que hoy se una la Cruz Roja a petición de los propios manifestantes. El párroco de la iglesia de San Mateo y vicario episcopal de Lorca, José Carrasco Pellicer, sólo puso dos condiciones para prestar los locales sociales de su iglesia al colectivo de inmigrantes: que en el salón sólo permanecieran los extranjeros, sin la presencia de españoles, y que no masificaran en exceso las dependencias. 'Yo no les he dejado el salón a los sindicatos ni partidos. Que sean ellos los que decidan lo que quieren y que sean ellos los protagonistas', dijo el sacerdote tras ceder sus dependencias.
El vicario recordó el papel de la Iglesia católica con el colectivo extranjero y mostró su apoyo a las reivindicaciones de los inmigrantes. 'Cáritas Interparroquial de Lorca es el estamento que más seriamente trabaja con ellos. Queremos que se les dé una solución: hacen falta en Lorca y, por otra parte, necesitan trabajar', aseguró Carrasco.
Entre las propuestas planteadas por los colectivos de inmigrantes de Pulpí (Almería), Rumiñahui Hispano-Ecuatoriana de Lorca y el Grupo de Inmigrantes de Lorca se encuentra la solicitud al Ejecutivo de una exención de visado colectiva para que la legalización se produzca 'sin el agravio económico' de tener que regresar al país de origen, como propuso el delegado del Gobierno para la Extranjería, Enrique Fernández-Miranda.
Uno de los portavoces de la protesta y vicepresidente del colectivo Rumiñahui en Lorca, Rolando Súarez, apeló al drama personal que muchos ecuatorianos padecerían al regresar a su país sin haber saldado la deuda que les permitió llegar a España. 'Lo único que pedimos es trabajo, si bien es cierto que aquí en España falta mano de obra y no hay mucha juventud ni niños. Señor [José María] Aznar, esperamos que usted se sensibilice. Sólo queremos que se nos legalice y tenga en cuenta que venimos con una deuda', afirmó.
En la proclama realizada por los inmigrantes también se hace alusión al reciente accidente de Lorca, en el que 12 inmigrantes perdieron la vida al ser arrollados por un tren en un paso a nivel, a los siniestros laborales y a los naufragios en las costas de Cádiz. 'Las leyes restrictivas de extranjería son las que generan muerte en los lugares de trabajo, en las carreteras y en el Estrecho'. Ayer fue nombrado Consejero General de Seguridad del ministerio de Fomento Eladio Lanzas Merino, un cargo de nueva creación para coordinar las actuaciones en esa materia.
En la reunión mantenida la madrugada del martes entre el alcalde lorquino, Miguel Navarro, el obispo de la diócesis de Cartagena-Murcia, Manuel Ureña, y el párroco José Carrasco Pellicer, quedó establecido la disposición del servicio de Protección Civil para atender a los encerrados en cuestiones de avituallamiento así como la permanente vigilancia de la puerta de acceso por parte de la Policía Local, que ayer vestía de calle. Los agentes impiden el paso a cualquier persona ajena a la protesta, includos los medios de comunicación, que sólo contaron ayer con 10 minutos para dialogar con los encerrados.
Cruz Roja no tuvo conocimiento oficial del encierro ni petición formal de ayuda desde ningún ámbito institucional; sólo el reclamo de su presencia por parte de los inmigrantes, según explicó el secretario provincial, José Luis Morera, propició que se iniciara un dispositivo de ayuda a última hora del martes.
En los salones de la iglesia inmigrantes como Alexandra Pérez, llegada a España hace tres meses, mostraban su confianza por los resultados que ofrecerá el acto de protesta. 'Esta primera noche ha estado bien, aunque hayamos dormido en el suelo con mantas. Llegaremos hasta el final, hasta obtener respuestas. Y esperamos que sea para algo bueno', apuntó la inmigrante. Pedro Agustín, otro de los encerrados, añadió: 'Tengo la esperanza de que la fuerza que todos juntos generamos sirva de algo. Llevo 7 meses en España y, desde que ocurrió el accidente de Lorca, no he podido trabajar. Permaneceré aquí el tiempo que sea preciso'.
Representantes de las tres asociaciones que han convocado la protesta aseguran que los colectivos de inmigrantes de Madrid, Valencia y Zaragoza, mantendrán reuniones en apoyo a los encerrados en la iglesia de San Mateo. Un grupo de sesenta ecuatorianos les secunda desde anoche en la Iglesia de Santiago de Totana (Murcia).Los inmigrantes han empezado a recibir ya llamadas de solidaridad y los efectos de la protesta se extienden. La representante del colectivo de Pulpí (Almería) Patricia Villa Gómez aseguró que el Ayuntamiento de Cuevas de Almanzora, de la misma provincia, ha mostrado su disposición a mediar con el delegado del Gobierno, Fernando Hermoso, para analizar la situación del empleo en el campo.