La falta de fondos amenaza con dejar el aeropuerto sin metro en el año 2004

La llegada de la línea 9 del metro al aeropuerto de El Prat en el año 2004 está seriamente amenazada. El Gobierno catalán ha asumido que esta línea se financie al margen del plan de infraestructuras, pero las cantidades comprometidas garantizan la construcción del tramo que va desde Santa Coloma y Badalona hasta la Sagrera y, a lo sumo, desde la Sagrera hasta Sarrià. El trazado desde ahí hasta el aeropuerto ha sido supeditado a la obtención de fondos europeos, que hoy por hoy el Gobierno central no tiene previsto solicitar.

El Gobierno catalán ha decidido declarar prioritaria la línea 9...

La llegada de la línea 9 del metro al aeropuerto de El Prat en el año 2004 está seriamente amenazada. El Gobierno catalán ha asumido que esta línea se financie al margen del plan de infraestructuras, pero las cantidades comprometidas garantizan la construcción del tramo que va desde Santa Coloma y Badalona hasta la Sagrera y, a lo sumo, desde la Sagrera hasta Sarrià. El trazado desde ahí hasta el aeropuerto ha sido supeditado a la obtención de fondos europeos, que hoy por hoy el Gobierno central no tiene previsto solicitar.

El Gobierno catalán ha decidido declarar prioritaria la línea 9 del metro y reservar 60.000 millones de pesetas para la construcción del tramo entre Santa Coloma y Badalona (tiene dos puntos de origen o final) y la Sagrera. Estas obras, que pueden arrancar en primavera, serán pagadas por el sistema alemán (a la entrega de la obra, con la posibilidad de un aplazamiento hasta un máximo de 10 años). Paralelamente, la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM) ha realizado los trámites para obtener un crédito del Banco Europeo de Inversiones (BEI) por un importe de 110.000 millones de pesetas. Si fuera concedido, esto permitiría proseguir las obras desde la Sagrera hasta Sarrià, con un trazado similar al de la Ronda del Mig.Pero para llegar de Sarrià hasta la zona universitaria, la plaza de Cerdà, la Zona Franca y el aeropuerto no hay dinero. El Gobierno catalán, con el apoyo en este punto del Ayuntamiento de Barcelona, sostiene que la construcción de esta línea puede y debe ser financiada al menos en parte con fondos europeos, como se ha hecho con la línea de metro entre Barajas y el centro de Madrid. Pero la disposición del Gobierno central a reclamar estos fundos es nula hoy por hoy.

El Partido Popular mantiene silencio al respecto, aunque en voz baja sugieren que el problema es menor porque el aeropuerto estaría unido a Barcelona por el AVE. El problema, sin embargo, es que esto tampoco está garantizado, de forma que se podría llegar al año 2004 con el aeropuerto sin transporte colectivo, una de sus grandes lagunas.

En el propio Partido Popular de Cataluña se han levantado voces que piden un cambio de actitud por parte del Gobierno central. La más destacada ha sido la de Alberto Fernández Díaz, quien ha sugerido que la petición de fondos europeos para la línea del AVE se podría incluir en el mismo paquete del túnel de Bracons y del desdoblamiento de la C-1411. Pero también se ha dejado oír la de Enrique Lacalle, delegado especial para la Zona Franca, que sostiene que el servicio de metro para el polígono es uno de los factores imprescindibles para su completo desarrollo.

Fernández Díaz y Lacalle tienen que convencer del interés de estas inversiones al ministro de Administraciones Públicas, Mariano Rajoy, que fue quien comunicó al consejero de Gobernación, Josep Antoni Duran Lleida, la falta de disposición del Gobierno a solicitarlos.

En cualquier caso, fuentes del Gobierno catalán aseguraron que los 60.000 millones previstos para el tramo Badalona-Sagrera forman parte de los 110.000 que permitirían llegar a Sarrià y que no son dos partidas que puedan sumarse para construir la totalidad de la línea.

El Gobierno catalán desearía que la gestión de la obra fuera otorgada a la empresa pública GISA (Gestión de Infraestructuras, SA), si bien esto no supondría un incremento en el endeudamiento de este organismo.