LA OFENSIVA DE ETA

Una pérdida sin precedentes en ETA

ETA nunca había perdido cuatro activistas en una sola jornada, ni por la explosión de una bomba que portasen, ni en enfrentamiento con los distintos cuerpos y fuerzas de seguridad. En agosto de 1991, tres miembros liberados (a sueldo) del comando Donosti , Patxi Itziar, Iñaki Ormaechea y Jokin Leunda, murieron tras mantener un tiroteo de cuatro horas con agentes de la Guardia Civil en el barrio de Morlans, en San Sebastián.En varias ocasiones han resultado muertos dos activistas cuando mantenían tiroteos con agentes policiales o por la explosión de sus propias bomba...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

ETA nunca había perdido cuatro activistas en una sola jornada, ni por la explosión de una bomba que portasen, ni en enfrentamiento con los distintos cuerpos y fuerzas de seguridad. En agosto de 1991, tres miembros liberados (a sueldo) del comando Donosti , Patxi Itziar, Iñaki Ormaechea y Jokin Leunda, murieron tras mantener un tiroteo de cuatro horas con agentes de la Guardia Civil en el barrio de Morlans, en San Sebastián.En varias ocasiones han resultado muertos dos activistas cuando mantenían tiroteos con agentes policiales o por la explosión de sus propias bombas. El último incidente de este tipo se produjo también en Bilbao en septiembre de 1997, cuando dos integrantes también del comando Vizcaya, Gaizka Gaztelumendi y José Miguel Bustinza, fallecieron en el curso de un enfrentamiento con la Guardia Civil.

Más información

El único antecedente de cuatro terroristas muertos en una sola jornada fue el de los cuatro integrantes de los Comandos Autónomos Anticapitalistas, abatidos por policías de los Grupos Especiales de Operaciones (GEO) en marzo de 1984, cuando iban a desembarcar de una lancha en el puerto de Pasajes. Los muertos fueron Pedro María Isar, Rafael Delas Aizcorde, Dionisio Aizpuri Arbelaiz y José María Isidro Izura. A los cuatro se les atribuye el asesinato del senador socialista Enrique Casas.

Con la muerte de los cuatro presuntos etarras ocurrida el lunes, se elevan a 34 los integrantes de la organización terrorista y grupos afines fallecidos por la explosión de las bombas que manipulaban, desde 1969. Otros siete activistas de Iraultza (Revolución) han fallecido en similares circunstancias. Los años 1983, con seis fallecidos, y 1987, con cuatro, fueron los que registraron más etarras muertos por sus propias bombas.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En