Un hombre muere al estallarle una mochila con cohetes en Gandía
Vicente Serrano, de 44 años de edad y natural de Madrid, falleció ayer al explotarle el material pirotécnico que portaba en una mochila cuando participaba en una despertà de las fiestas de Gandía (Valencia). La víctima veraneaba en esta localidad y desde hace años participaba en la festividad que la Cofradía de Pescadores del Grau organiza con motivo de la festividad de la Virgen del Carmen. Sobre las 8 de la mañana, Vicente Serrano y cinco personas más realizaban la exhibición matutina de ruido y fuego que anuncia la fiesta. Por causas que ayer todavía se desconocían, los artefactos de...
Vicente Serrano, de 44 años de edad y natural de Madrid, falleció ayer al explotarle el material pirotécnico que portaba en una mochila cuando participaba en una despertà de las fiestas de Gandía (Valencia). La víctima veraneaba en esta localidad y desde hace años participaba en la festividad que la Cofradía de Pescadores del Grau organiza con motivo de la festividad de la Virgen del Carmen. Sobre las 8 de la mañana, Vicente Serrano y cinco personas más realizaban la exhibición matutina de ruido y fuego que anuncia la fiesta. Por causas que ayer todavía se desconocían, los artefactos de pirotecnia que llevaba a la espalda en una mochila estallaron, produciéndole heridas mortales. La víctima falleció minutos después de ingresar en el hospital Francesc de Borja de Gandía en estado de shock y con politraumatismo. Los demás miembros del grupo no sufrieron heridas.
Conocido en la cofradía de pescadores como el madrileño, Serrano participaba desde hacía años en la despertà y era muy meticuloso en la manipulación de productos pirotécnicos, según manifestaron fuentes de la comisión de fiestas del Grau. La cofradía suspendió todas las actividades festivas previstas para ayer en señal de duelo.
Vicente Serrano trabajaba desde hace 22 años en EL PAÍS. Actualmente era oficial primera de cierre y, desde 1997, miembro del comité de empresa del periódico. Era apreciado por su profesionalidad y muy querido por sus compañeros de trabajo. Serrano deja tres hijas, una de las cuales, que estaba con él en el momento del accidente, resultó herida.