Tribuna:

Destino

Todo un aviso a navegantes: el turista tiene tantos motivos para repetir vacaciones como para no volver jamás a la costa valenciana. Es cuestión de abrirle los ojos respecto a aspectos negativos, que los hay, y presentarle una oferta interesante en algún lugar del mundo soleado y con playas. Y se acabó la fidelidad con el destino que algunos municipios esgrimen como la principal de sus características.Así de claro se lo dijo la semana pasada un representante de Airtours, el mayor operador turístico británico (nueve millones de viajeros anuales), a los empresarios del sector, a los que reclamó ...

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Todo un aviso a navegantes: el turista tiene tantos motivos para repetir vacaciones como para no volver jamás a la costa valenciana. Es cuestión de abrirle los ojos respecto a aspectos negativos, que los hay, y presentarle una oferta interesante en algún lugar del mundo soleado y con playas. Y se acabó la fidelidad con el destino que algunos municipios esgrimen como la principal de sus características.Así de claro se lo dijo la semana pasada un representante de Airtours, el mayor operador turístico británico (nueve millones de viajeros anuales), a los empresarios del sector, a los que reclamó más calidad en sus instalaciones y contención de precios, a la par que les animó a presionar a la Administración española para que no grave al sector con nuevos tributos, porque eso, dice, encarecería el paquete vacacional y se traduciría en una inevitable fuga de visitantes. La intervención del experto asustó a los hoteleros, pero sirvió al alcalde de Benidorm, Vicente Pérez Devesa, pa-ra decir en público lo que todos ellos piensan: que los operadores turísticos son demasiado poderosos e influyentes, mandan en el mercado, imponen precios, marcan temporadas, presionan y campan por sus fueros. La situación es preocupante, porque esas compañías son capaces de generar nuevos destinos y relegar los consolidados a un segundo plano, empujándolos a una crisis de la que sería difícil salir.

Lejos queda la época en la que los operadores financiaban la construcción de hoteles para disponer de plazas suficientes en uno de los destinos más baratos del mundo. Ahora se han perfeccionado. Se construye con capital español, pero en la práctica ellos dirigen las instalaciones y, más aún, la política turística de ejecutivos autonómicos.

¿Cómo se explica, de otra forma, que el Consell se niegue a debatir la conveniencia de implantar una ecotasa para que el sector colabore en la regeneracion de espacios naturales y la construcción de infraestructuras hídricas? La propuesta socialista se lanzó coincidiendo con la visita de los representantes de Airtours, y la respuesta fue el aviso.

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