Los policías se tiñen de verde el pelo como protesta por el recorte de la paga de productividad

Los funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía de Madrid iniciaron ayer una campaña de protesta contra la "inesperada reducción" de los incentivos de productividad. Los sindicatos denuncian que la Dirección General de Policía no ha desembolsado la paga trimestal prometida, de unas 60.000 pesetas netas, si se cumplían los objetivos de bajar los índices de delincuencia en Madrid en un 5,6 %, según lo establecido en el Proyecto Policía 2000. Los policías mantienen que han conseguido reducir los seis delitos más comunes en un 7% y reclaman su paga.

El Programa Policía 2000 establecía unos ...

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Los funcionarios del Cuerpo Nacional de Policía de Madrid iniciaron ayer una campaña de protesta contra la "inesperada reducción" de los incentivos de productividad. Los sindicatos denuncian que la Dirección General de Policía no ha desembolsado la paga trimestal prometida, de unas 60.000 pesetas netas, si se cumplían los objetivos de bajar los índices de delincuencia en Madrid en un 5,6 %, según lo establecido en el Proyecto Policía 2000. Los policías mantienen que han conseguido reducir los seis delitos más comunes en un 7% y reclaman su paga.

El Programa Policía 2000 establecía unos incentivos económicos al rendimiento si se conseguían reducir los delitos que más abultan la estadística de la criminalidad: robos de coches, sustracciones en vehículos, tirones, robos en inmuebles, menudeo de droga y gamberrismo (daños a fachadas y mobiliario urbano). El proyecto diseñado por la Dirección General de Policía partía de un aumento de la presencia policial en las calles. Los premios a la productividad (una media de 60.000 pesetas trimestrales por agente, con variaciones según el tipo de trabajo y los turnos) han ido entregándose a partir de conseguir el objetivo de reducir los delitos en un 8% el año pasado y en un 5,7% durante 2000. Sin embargo, este trimestre los funcionarios de policía se han quedado perplejos al ver que no han recibido los incentivos prometidos, por lo que iniciaron ayer las movilizaciones. Ningún responsable de la Jefatura Superior de Policía de Madrid quiso opinar ayer sobre las denuncias de los funcionarios.

Las protestas arrancaron con una concentración de dos centenares de agentes frente a la comisaría de Centro en la que algunos policías aparecieron con el pelo teñido de verde, rojo y amarillo. El acto reivindicativo estaba convocado por los sindicatos policiales SUP, ANPU, UFP y SPPU, que representan a más 6.000 policías en la región. "Con estos colores chillones queremos llamar la atención porque nos sentimos engañados por el Director General de Policía", dijo Bernardo Bravo Toribio, secretario general del SUP. "Deberíamos haber cobrado una paga de unas 60.000 pesetas netas si se cumplían los objetivos del denominado programa 2000, tal y como ha quedado reflejado en la estadísticas de las comisarías. Nos hemos quedado de piedra al recibir la nómina de abril y ver que la paga de 60.000 pesetas del año pasado quedaba reducida hasta a 3.000 pesetas por los tres meses", dijo Bravo.

Según los sindicatos policiales, los funcionarios de Tetuán, Fuencarral y Parla han sido los que más han cobrado, unas 30.000 pesetas frente a las 2.800 pesetas que han percibido algunos policías de la Unidad Motorizada de la Brigada Provincial de Seguridad Ciudadana.

Los manifestantes portaban una pancarta con los siguientes lemas: "Madrid, contra la manipulación del Plan 2000"; "Contra la aplicación arbitraria del Plan 2000"; "No más falsas promesas electorales; "Seguridad ciudadana, sí, explotación del CNP, no"; "Mayor, Cotino, la Policía os importa un comino".

Algunos agentes de Policía de Proximidad salieron incluso a patrullar por las calles con el pelo teñido, lo que les podría acarrear la apertura de un expediente disciplinario, según fuentes policiales.

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Concentraciones

Los cuatro sindicatos policiales han decidido elaborar un calendario de movilizaciones con el siguiente programa de concentraciones entre las dos y las tres de la tarde: comisarías de Móstoles (día 18), Puente de Vallecas (día 23), Carabanchel (día 25) y Fuenlabrada (día 30). Los policías han elegido estas comisarías porque son las que tienen más dificultades para alcanzar sus objetivos impuestos por la Dirección General de Policía.

La desregulación de la jornada laboral, la pérdida de poder adquisitivo, la vulneración de los derechos sindicales y la implantación de las patrullas unipersonales son algunos de los "abusos" que denuncian los sindicatos.

"La jornada laboral de los policías es de 37 horas y media y ahora mismo venimos realizando más de 40 horas y con horarios partidos. A algunos compañeros se les hace trabajar durante la tarde y se les manda a casa para citarles de nuevo por la noche y todo esto sin un operativo policial", denunció uno de los agentes del ANPU.

Los policías también denuncian la falta de medios y materiales. "En todas las comisarías hacen falta funcionarios, sobre todo en lugares como Móstoles, Aranjuez y Parla, que son poblaciones que han crecido en habitantes pero no en agentes", denunció Antonio Sánchez, del SUP.

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