La BOS abrirá su concierto con la obra 'Laiñoa', de Antón Larrauri
La Orquesta Sinfónica de Bilbao (BOS) abrirá sus próximos conciertos de abono (Palacio Euskalduna; hoy y mañana, 20.00)con la obra Laiñoa, del compositor vasco Antón Larrauri. A continuación, la BOS interpretará el Concierto para violón y orquesta en re mayor, de Piotr I. Chaikovsky y cerrará su actuación con la Sinfonía número cinco en re menor, de Dmitri D. Shostakovitch. Ambos conciertos serán dirigidos por el titular de la BOS, Juanjo Mena.Larrauri definió su obra como una partitura que quiere reflejar la niebla "con esa voz que increpa en ellas". Laiñoa es una composición para orquesta, e...
La Orquesta Sinfónica de Bilbao (BOS) abrirá sus próximos conciertos de abono (Palacio Euskalduna; hoy y mañana, 20.00)con la obra Laiñoa, del compositor vasco Antón Larrauri. A continuación, la BOS interpretará el Concierto para violón y orquesta en re mayor, de Piotr I. Chaikovsky y cerrará su actuación con la Sinfonía número cinco en re menor, de Dmitri D. Shostakovitch. Ambos conciertos serán dirigidos por el titular de la BOS, Juanjo Mena.Larrauri definió su obra como una partitura que quiere reflejar la niebla "con esa voz que increpa en ellas". Laiñoa es una composición para orquesta, electrónica y soprano. La cantante elegida para interpretarla ha sido Isabel Álvarez, una especialista en música antigua y oratorio.
El concierto de Chaikovsky fue escrito en tan sólo 11 días, pero por su dificultad interpretativa cayó en el olvido varios años. Cuando fue estrenado en Viena, las destrezas técnicas que exige al solista generaron una fuerte polémica. En los conciertos de Bilbao ha sido invitado a actuar con la BOS el violinista ruso Borís Belkin.
El concierto finalizará con la Sinfonía número cinco, de Shostakovitch. Aunque fue considerado el "compositor oficial" del régimen soviético, títulos como el elegido por la BOS hicieron que la ambigüedad reinara en su relación con los burócratas del estalinismo.
Shostakovitch estrenó la sinfonía en la Sociedad Filarmónica de San Petersburgo, entonces denominada Leningrado, en noviembre de 1937. Cosechó un triunfo absoluto, gracias a una importante construcción musical de vigorosos temas en constante progresión.