Una explosión de propano vuela la fachada de un edificio en Tetuán En la deflagración, ocurrida de madrugada, no se registraron heridos
La suerte y las vacaciones de Semana Santa. Esos dos factores fueron determinantes para que no se registraran víctimas en la explosión de gas propano que destruyó una vivienda y acabó con la fachada de un edificio del distrito de Tetuán. La deflagración ocurrió de madrugada, cuando parte del inmueble se encontraba vacío. Los bomberos permanecieron en el lugar cerca de cuatro horas, hasta que apagaron el incendio y comprobaron el estado de las viviendas.
La explosión ocurrió alrededor de la una y media de la madrugada en la calle del General Aranda, 28, en el segundo piso izquierda. La d...
La suerte y las vacaciones de Semana Santa. Esos dos factores fueron determinantes para que no se registraran víctimas en la explosión de gas propano que destruyó una vivienda y acabó con la fachada de un edificio del distrito de Tetuán. La deflagración ocurrió de madrugada, cuando parte del inmueble se encontraba vacío. Los bomberos permanecieron en el lugar cerca de cuatro horas, hasta que apagaron el incendio y comprobaron el estado de las viviendas.
La explosión ocurrió alrededor de la una y media de la madrugada en la calle del General Aranda, 28, en el segundo piso izquierda. La deflagración destruyó por completo esta vivienda y afectó a las casas colindantes, que recibieron numerosos cascotes y parte de los falsos techos. La fachada lateral del edificio se cayó por completo a un patio interior de la manzana de casas. Se da la circunstancia de que la familia de la casa en la que explotó el gas propano se encontraba fuera de la vivienda, ya que trabaja por la noche. Los moradores de los pisos superior e inferior estaban de vacaciones, según explicaron algunos vecinos. "Yo estaba acostada y estaba durmiendo tranquilamente. De repente, oí ruido muy fuerte y, al momento, otro, pero algo más débil. En ese momento comenzaron a caer muchos cascotes y parte de la fachada. He pasado mucho miedo y un gran pánico, porque nadie se espera una catástrofe de esta índole", señaló Francisca Girona, una vecina de la primera planta, cuyo piso resultó intacto.
Desalojo del inmueble
Los bomberos desplazaron hasta el lugar varias dotaciones, que se encargaron de apagar el fuego producido por la explosión. Esta tarea les tuvo ocupados hasta cerca de las cinco de la madrugada. Se procedió también al desalojo de la parte izquierda del edificio, ante el riesgo de posibles desprendimientos. Los afectados pasaron la noche en casa de familiares, por lo que no fue preciso su hospedaje en pensiones facilitadas por el Ayuntamiento.
Los técnicos municipales del Departamento de Edificación Deficiente comprobaron ayer por la mañana el estado en que quedó el edificio. Tras supervisar todas las plantas, aseguraron que la deflagración afectó a las vigas del forjado y a las jácenas principales (apoyos en los que se sustentan las vigas secundarias).
"También analizaremos el estado en que ha quedado la otra parte del edificio [la derecha], pero en principio creemos que la estructura no estará tan afectada como la parte que ya hemos inspeccionado", señaló una aparejador municipal.
Los operarios encargados del desescombro vallaron toda la zona para impedir el acceso de curiosos. Estuvieron toda la mañana retirando los cascotes y despejando la zona para que mañana puedan comenzar los trabajos de reconstrucción de la vivienda.