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El Ayuntamiento de Valencia ampliará la cobertura gratuita de la EMT a todos los jubilados en 2001

El Ayuntamiento de Valencia aprobó ayer por unanimidad, a propuesta del grupo municipal socialista, una moción para extender la cobertura gratuita de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) a todos los pensionistas y jubilados empadronados en la ciudad a partir de 2001. Actualmente, viajan gratis en los autobuses de la EMT alrededor de 43.000 jubilados cuya pensión no supera el salario mínimo interprofesional de 70.800 pesetas. El edil socialista Rafael Rubio reclamó ayer que el pase gratuito fuese ampliado a aquellos jubilados cuya pensión, dividida entre el número miembros de la unidad fam...

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El Ayuntamiento de Valencia aprobó ayer por unanimidad, a propuesta del grupo municipal socialista, una moción para extender la cobertura gratuita de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) a todos los pensionistas y jubilados empadronados en la ciudad a partir de 2001. Actualmente, viajan gratis en los autobuses de la EMT alrededor de 43.000 jubilados cuya pensión no supera el salario mínimo interprofesional de 70.800 pesetas. El edil socialista Rafael Rubio reclamó ayer que el pase gratuito fuese ampliado a aquellos jubilados cuya pensión, dividida entre el número miembros de la unidad familiar, no superase el salario mínimo interprofesional. El concejal de Transportes del Ayuntamiento de Valencia, el popular Jorge Bellver, expresó su disgusto por la iniciativa de los socialistas al calificar de "oportunista" la moción y acusó a Rafael Rubio de "haber oído cantos de sirena" en la EMT. Sin embargo, el concejal de Transportes anunció su disposición a hacer extensiva la gratuidad de los autobuses públicos a todos los pensionistas y jubilados a partir del año que viene y presentó una moción alternativa que fue aprobada unánimemente por toda la Corporación. Hasta ahora la subvención de los billetes de la EMT es de 1.384 millones de pesetas anuales. En el mismo pleno, el gobierno popular se negó a una moción de la oposición que exigía sanciones inmediatas a Aguas de Valencia por el corte de suministro. Durante el pleno, medio centenar de vecinos, convocados por la plataforma Salvem El Cabanyal-Canyamelar realizó una cacerolada contra la alcaldesa Rita Barberá por su intención de seguir adelante con la prolongación de la avenida Blasco Ibañez hasta el mar, que dividirá el barrio en dos.

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