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Todos los partidos del arco parlamentario firmaron ayer un escrito en el que piden el amparo de la Junta Electoral Central frente al partidismo de TVE en beneficio del Partido Popular. La queja se fundamenta en un estudio pormenorizado de los telediarios emitidos en la primera cadena de la televisión pública durante los días 5 al 8 de febrero. El partido del Gobierno ocupó dos tercios del espacio informativo destinado a las fuerzas políticas, y Aznar, el 43% del tiempo destinado a los líderes políticos. Es la primera vez en la historia de nuestra democracia en que todas las formaciones polític...
Todos los partidos del arco parlamentario firmaron ayer un escrito en el que piden el amparo de la Junta Electoral Central frente al partidismo de TVE en beneficio del Partido Popular. La queja se fundamenta en un estudio pormenorizado de los telediarios emitidos en la primera cadena de la televisión pública durante los días 5 al 8 de febrero. El partido del Gobierno ocupó dos tercios del espacio informativo destinado a las fuerzas políticas, y Aznar, el 43% del tiempo destinado a los líderes políticos. Es la primera vez en la historia de nuestra democracia en que todas las formaciones políticas se unen en una misma denuncia contra el favoritismo gubernamental de TVE, incluidos los partidos que han apoyado a Aznar durante la legislatura que termina.Puede discutirse si el criterio de tiempo de aparición en pantalla es el único a tener en cuenta, pero la desproporción es tan evidente que lo cuantitativo se convierte en cualitativo. Sobre todo si se considera que se excluyen las apariciones institucionales de los ministros y que en esos cuatro días la noticia política dominante en la mayoría de los medios fue el acuerdo entre el PSOE e IU, que se ultimó el día 6.
En vísperas de las elecciones es habitual que la oposición plantee quejas similares, casi siempre fundamentadas, independientemente de qué partido esté gobernando. La novedad establecida en las elecciones de junio fue que la Junta Electoral Central se vio obligada a intervenir ante abusos verificables. Por ejemplo, relegar la presencia de los candidatos de los partidos de la oposición a los informativos de menor audiencia -para contabilizar minutos y cubrirse de protestas cuantitativas-, o programar la entrevista con la candidata socialista para las europeas a la misma hora que se trasmitía por la primera cadena un partido de fútbol. La Junta Electoral amonestó reiteradamente a la dirección de RTVE por esos y otros comportamientos que vulneraban el criterio de neutralidad y proporcionalidad.
En su programa electoral de 1996, el PP arremetía contra la "beligerante orientación partidista" de la televisión durante los gobiernos socialistas y se comprometía expresamente a respetar los criterios de "objetividad, veracidad e imparcialidad" desde el Gobierno. ¿Serán capaces de volver a escribirlo en el programa para las legislativas del 12 de marzo?