La rocambolesca "operación Nesta"

El Atlético se comprometió a fichar al defensa central del Lazio, Alessandro Nesta, en 1997, según fuentes del club. La operación, que se montó a través del fichaje del bosnio Rade Bogdanovic por 2.900 millones de pesetas, fue cerrada con la empresa holandesa de intermediación Bandoorn. La transacción incluyó a otros dos jugadores, el yugoslavo Ciric y el portugués Dani. El último plazo del pago ha sido suspendido por el administrador judicial del Atlético, Luis Manuel Rubí, lo que puede suponer la ruptura del trato. De frustrarse la llegada de estos tres futbolistas, las mismas fuentes del cl...

El Atlético se comprometió a fichar al defensa central del Lazio, Alessandro Nesta, en 1997, según fuentes del club. La operación, que se montó a través del fichaje del bosnio Rade Bogdanovic por 2.900 millones de pesetas, fue cerrada con la empresa holandesa de intermediación Bandoorn. La transacción incluyó a otros dos jugadores, el yugoslavo Ciric y el portugués Dani. El último plazo del pago ha sido suspendido por el administrador judicial del Atlético, Luis Manuel Rubí, lo que puede suponer la ruptura del trato. De frustrarse la llegada de estos tres futbolistas, las mismas fuentes del club advirtieron de que el Atlético debería pagar una indemnización de 1.400 millones.El Atlético se comprometió a pagar a plazos un precio 30 veces superior al del mercado por Bogdanovic, oficialmente fichado por menos de 100 millones. A cambio, Bandoorn le garantizó la adquisición de tres jugadores con la carta de libertad: Nesta, Ciric (ex delantero del Barcelona y ahora en Grecia) y Dani ( Ajax). Los tres llegarían a Madrid el próximo verano, tres años después del acuerdo.

El Lazio ha llegado a pedir más de 3.000 millones de pesetas por Nesta, de 23 años, considerado uno de los defensas con más proyección de Italia. El fichaje de Nesta por el Atlético -sin pagar ninguna cantidad- estaría garantizado gracias al compromiso que subyace entre el club y Bandoorn. Esta empresa puede actuar libremente por hallarse fuera de la jurisdicción de la FIFA -no es una institución adscrita a las normas del máximo organismo del fútbol-, que prohíbe las negociaciones entre los clubes de fútbol compradores y los jugadores antes de que resten seis meses para el cumplimiento de los contratos en vigor de los futbolistas.

Quizá perplejo ante una realidad que desconoce, Rubí Blanc suspendió el pago del último plazo de la deuda de 2.900 millones por Bogdanovic.

Por otra parte, Miguel Ángel Gil, director general del Atlético, aclaró ayer que el club debe 580.000 pesetas a su hermana Myriam Gil, y no 500 millones como, por error, se publicó ayer.