LIBROS

El grupo de rock gallego Os Diplomáticos de Montealto presenta el último libro de Manuel Rivas

El escritor Manuel Rivas (A Coruña, 1957) eligió ayer la música de Os Diplomáticos de Montealto para presentar sus dos últimos libros: Ella, maldita alma (Alfaguara), en el que reúne 13 nuevos relatos, y El secreto de la tierra, en el que se reeditan Un millón de vacas, de 1990, y Los comedores de patatas, de 1992.Os Diplomáticos, un proyecto musical que mezcla las raíces gallegas con el rock y con otras influencias contemporáneas, ilustró lo que el autor del Lápiz del carpintero llamó "contrabando de géneros y de cultura", una mezcla que él asegura que aplica a su literatura, que según él est...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El escritor Manuel Rivas (A Coruña, 1957) eligió ayer la música de Os Diplomáticos de Montealto para presentar sus dos últimos libros: Ella, maldita alma (Alfaguara), en el que reúne 13 nuevos relatos, y El secreto de la tierra, en el que se reeditan Un millón de vacas, de 1990, y Los comedores de patatas, de 1992.Os Diplomáticos, un proyecto musical que mezcla las raíces gallegas con el rock y con otras influencias contemporáneas, ilustró lo que el autor del Lápiz del carpintero llamó "contrabando de géneros y de cultura", una mezcla que él asegura que aplica a su literatura, que según él está despojada de prejuicios intelectuales para buscar la otra lógica de la realidad. "Escribir no es un oficio solitario, es un oficio que hacen los demás por ti; escribir es una constante transmigración de almas", añadió el escritor gallego.

Rivas, que en uno de sus cuentos encuentra "el secreto del alma" en la guitarra eléctrica que desea un joven pescador y que habla de la "materia prima" del tiempo perdido, señaló ayer que las almas se pueden detectar "en el tapón de una botella, en una barra de pan o en el tic del labio superior de un cura cuando ve pasar a un tipo determinado de mujer". El escritor añadió: "La idea de este libro era la de cómo se podían localizar esas almas. Y, haciéndome esa pregunta, viajando a mi propio corazón de las tinieblas, he encontrado el secreto que buscaba".

"He querido", añadió Rivas, "devolver el sentido carnal a palabras como alma y transmigración". El escritor, que aseguró que ante la literatura no se siente como "un cirujano", sino como "un curandero de las palabras, un curandero de sombras", se defendió de las connotaciones "esotéricas y mágicas", aunque también explicó que este libro de cuentos no es un encargo de sus editores, sino "una iluminación".

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Sobre la firma

Archivado En