Fomento intenta pactar con cuatro autonomías el AVE Madrid-Valencia

El ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado, se reunió anoche con los presidentes de las comunidades autónomas de Madrid, Castilla-La Mancha, Valencia y Murcia con la idea de ponerles de acuerdo sobre el trazado de la línea ferroviaria de alta velocidad que unirá Madrid con la costa mediterránea. Técnicos del ministerio trabajaron durante todo el día para tener listos los planos de los trazados que propone cada autonomía y su coste, con el fin de discutirlos e intentar pactar un trazado definitivo.

Al cierre de esta edición no se había tomado una decisión. El ministro tiene difícil...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado, se reunió anoche con los presidentes de las comunidades autónomas de Madrid, Castilla-La Mancha, Valencia y Murcia con la idea de ponerles de acuerdo sobre el trazado de la línea ferroviaria de alta velocidad que unirá Madrid con la costa mediterránea. Técnicos del ministerio trabajaron durante todo el día para tener listos los planos de los trazados que propone cada autonomía y su coste, con el fin de discutirlos e intentar pactar un trazado definitivo.

Más información

Al cierre de esta edición no se había tomado una decisión. El ministro tiene difícil conciliar las demandas de cuatro comunidades para que una línea de alta velocidad pase por todas las capitales de sus territorios y queden así conectadas con Madrid en 100 minutos. El precedente de Cataluña, que antes del año 2004 tendrá conectadas por AVE, sus cuatro capitales (Lleida, Tarragona, Barcelona y Girona) juega en contra del ministerio. Ahora las demás comunidades quieren igualarse a la catalana.El enlace Madrid-Valencia/Alicante/Murcia en alta velocidad no estaba previsto en el Plan Director de Infraestructuras que diseñó el PSOE, ni figuraba en los planes de Fomento una línea de este tipo para unir territorios a menos de 350 kilómetros de distancia. En todos los Presupuestos de los últimos años se han destinado partidas para adaptar este trayecto a velocidades de 220 kilómetros por hora (el AVE alcanza los 300-350). Todos los expertos en transportes consultados coinciden en que es suficiente para la demanda de tráfico entre la costa mediterránea y el centro peninsular. Sin embargo, el grupo de presión constituido por los presidentes de Madrid, Alberto Ruiz Gallardón, y de la Comunidad Valenciana, Eduardo Zaplana, ambos del PP, torció esos planes y forzaron a Fomento a tomar la bandera de la alta velocidad hace año y medio. Se comprometían a sufragar el 50% de su coste, estimado en más de 400.000 millones de pesetas. A cambio, pedían que el tiempo de recorrido fuese inferior a las dos horas. Esta iniciativa fue secundada en abril pasado por el presidente de Castilla-La Mancha, José Bono, del PSOE, quien defiende un trazado que incluye el paso del tren por Guadalajara, Cuenca y Albacete. Los presidentes sellaron un pacto donde las tres autonomías se comprometían a presentar un trazado al ministro en estos días, de manera que las obras se puedan iniciar en el año 2000. En este convenio las promesas de cofinanciación autonómica se han reducido. A Fomento se le confía la construcción de la vía y el resto saldrá de los presupuestos regionales o de aportaciones privadas, sin ofrecer ningún detalle adicional. A última hora de ayer el ministro Arias-Salgado invitaba al encuentro al presidente de Murcia, Ramón Luis Valcárcel (PP), a participar en la decisión del trazado. Los Presupuestos del Estado para el año próximo no han reservado ni una peseta a esta iniciativa. Se supone que Fomento asignará su construcción al GIF (Gestor de Infraestructuras Ferroviarias) y una parte de su coste correrá por cuenta de la UE.

Unas mil personas se concentraron ayer en Cuenca para reivindicar la parada del AVE Madrid-Valencia en esta ciudad.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En