José Bono quiere que el AVE pare en Guadalajara, Cuenca y Albacete

El tren de alta velocidad proyectado entre Madrid y Valencia podría tener parada en Guadalajara, Cuenca y Albacete. Ésa es, al menos, la propuesta que va a presentar José Bono, presidente de Castilla-La Mancha, en la reunión que mantendrá el próximo lunes, día 27, con sus homólogos de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón; de Valencia, Eduardo Zaplana, y el ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado.Bono anticipó su propuesta a los representantes de las federaciones empresariales de Cuenca y Albacete. De estas dos provincias partiría hacia el resto de los puntos de Levante.

Tanto Zaplana como R...

El tren de alta velocidad proyectado entre Madrid y Valencia podría tener parada en Guadalajara, Cuenca y Albacete. Ésa es, al menos, la propuesta que va a presentar José Bono, presidente de Castilla-La Mancha, en la reunión que mantendrá el próximo lunes, día 27, con sus homólogos de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón; de Valencia, Eduardo Zaplana, y el ministro de Fomento, Rafael Arias-Salgado.Bono anticipó su propuesta a los representantes de las federaciones empresariales de Cuenca y Albacete. De estas dos provincias partiría hacia el resto de los puntos de Levante.

Tanto Zaplana como Ruiz-Gallardón quieren que las obras comiencen el año próximo y han ofrecido por ello a Fomento financiar la mitad de lo que cueste la construcción de la línea férrea en sus respectivas regiones.

José Bono, en cambio, se ha negado a participar en la financiación alegando que se trata de una infraestructura nacional que tiene que ser costeada por el Estado. El presidente de Castilla-La Mancha, que anticipó ayer su propuesta en unas jornadas sanitarias, plantea las paradas en Guadalajara, Cuenca y Albacete porque se ha marcado como objetivo que las cinco capitales de su región estén unidas por Madrid con una línea férrea de alta velocidad. El AVE a Sevilla para en Ciudad Real, y Toledo cuenta con una conexión rápida con la capital.

Alberto Ruiz-Gallardón, por su parte, no quiso pronunciarse ayer sobre las diferentes opciones que se están planteando, pero matizó que "la definición del trazado por Castilla-La Mancha y Valencia estará también en función de los intereses de los madrileños".

Menos de dos horas

"Las distancias en el siglo XXI no están en función de los kilómetros, sino de los minutos. Nosotros por lo que vamos a luchar es por estar en Valencia y en Alicante en menos de dos horas", afirmó. Ésa es también la condición que han puesto los empresarios levantinos que se han constituido como grupo de presión para hacer realidad el AVE. Están dispuestos a participar en la financiación si el tiempo que invierta el tren en unir la capital de España con Levante no pasa de 120 minutos.

La línea estará conectada, además, con el tren veloz que partirá de Chamartín hacia el cuadrante norte-noreste de la Península. Esta conexión se hará mediante un túnel entre las estaciones de Atocha y Chamartín que están estudiando en estos momentos los técnicos de Fomento.

El vicepresidente de Castilla-La Mancha, José María Barreda, se sumó ayer al debate sobre el trazado y desveló que Alberto Ruiz-Gallardón tiene "más simpatía" por un trazado que utilice para salir de Madrid la vía del AVE a Barcelona, en lugar de la de Sevilla, según Europa Press. Con ello, el tren arrancaría de Alcalá de Henares y pasaría cerca del aeropuerto de Barajas.