Tribuna:LA PAELLA DE LAS VANIDADES - GUILLEM MARTÍNEZ

La Feria de Celia

Los grandes ideólogos melillenses tenían el móvil desconectado. La alcaldesa de Cádiz y la de Málaga tienen una tendencia natural a formar pareja artística

Y ya que el cielo no me oyó / de mis pasos en Iberia / responda el cielo y no yo. Martínez al aparato. Novedades del día: a) Iberia me ha devuelto la maleta. Hacía tanto tiempo que no la veía que no me reconoce y se muestra fría y distante; b) Abandono Melilla. Un sitio extraño. Había quedado citado con algunos grandes ideólogos melillenses, pero todos tenían el móvil desconectado. Que los grandes ideólogos políticos del enclave tengan los teléfonos desconectados quizás sea toda una metáfora; c) La única cita que no se me rajó fue el legionario Benito López. La posible explicación es qu...

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Y ya que el cielo no me oyó / de mis pasos en Iberia / responda el cielo y no yo. Martínez al aparato. Novedades del día: a) Iberia me ha devuelto la maleta. Hacía tanto tiempo que no la veía que no me reconoce y se muestra fría y distante; b) Abandono Melilla. Un sitio extraño. Había quedado citado con algunos grandes ideólogos melillenses, pero todos tenían el móvil desconectado. Que los grandes ideólogos políticos del enclave tengan los teléfonos desconectados quizás sea toda una metáfora; c) La única cita que no se me rajó fue el legionario Benito López. La posible explicación es que falleció en 1950, y siempre está en el cementerio, donde los cristianos van a pedirle favores, y las musulmanas a hacer brico-brujería. El taxista que me lleva a ver a Benito me dice que los sortilegios musulmanes tienen una efectividad notoria. Sobre todo uno, que impide al afectado mantener conductas sexuales impropias. Las estándares, también. Cuidadín; d) Cuando abandono Melilla, Aznar llega a Marruecos. Sorpresa notoria al descubrir que todos esos tipos que veía eran marroquíes, a pesar de no estar dentro de una patera.Málaga era una fiesta. Bueno. Ahora estoy en Málaga, que está de feria. La cosa empezó este weekend. Yo estaba de paso. Me fui a cortar el pelo. La peluquería estaba repleta de mujeres y hombres poniéndose monos y haciendo proyectos. Todo el mundo hablaba de la feria con nerviosismo. Después, a las 12 pm salí a dar un voltio. Málaga avanzaba en una dirección, a paso ligero y sonriendo de oreja a oreja, como en una peli de Fellini. La gente se estacionó ante el ayuntamiento. Las luces se apagaron. Celia Villalobos salió al balcón y habló con singular gracejo. En plan chiste de Chiquito. Jarl. Posteriormente, un torero hizo el pregón de las fiestas. En un momento dado, la voz se le entrecortó. Se le metió un gargajo en la garganta o se emocionó. El mundo de los sentimientos, en fin, es muy complejo. Y empezaron los fuegos artificiales. Los malagueños seguían cada cohete con la mirada. Cuando explotaba decían oh. Oh es lo que se dice cuando dudamos. Era hermoso ver tanta gente junta dudando. La perplejidad nos hace hermosos. Nota: los fuegos se iniciaron en el tejado del ayuntamiento. Con la primera explosión salieron volando las palomas, que estaban durmiendo como ceporras. Una se me puso en el hombro y me dijo: "P'habernos matao, pollo".

Primer contacto con el fenómeno. Ya les iré explicando, pero la Feria de Málaga es una cosa extraña. Son dos ferias, por ejemplo. Una se celebra durante el día, y la otra durante la noche. Entre la del día y la de la noche quedan sólo pocos segundos, que los malagueños aprovechan, digo yo, para ir al lavabo. Es la feria más importante del verano andaluz. Desde que el PP se llevó por KO la alcaldía de Málaga, la fiesta ha sido declarada de utilidad pública por el staff del PP, que va a ejercer la simpatía ante las cámaras. Este fin de semana ya ha venido un ministro y la alcaldesa de Cádiz -vestida de labriega, de flamenca, o como se llame; como María Antonieta-. La alcaldesa de Cádiz y la de Málaga tienen una tendencia natural a formar pareja artística en estos lances. Son una especie de dúo Baccara de la derecha pádel. Bueno. La simpatía es uno de los pilares de la cultura política hispana, de lo que se deduce que somos el país más simpático de Europa.

Esa gente tan simpática. Me voy a ver a Celia Villalobos, que hoy, como cada día de feria, tiene show. Málaga es la quinta ciudad del Estado. Medio millón de habitantes, un crecimiento espectacular y desordenado durante la pasada década y un proyecto municipal no muy claro para el siglo XXI. Villalobos va por la feria de día, de caseta en caseta. Villalobos avanza por la calle como si fuera Elvis. La gente la detiene para besarla, tocarla, abrazarla. Y ella va y les besa, les toca, les abraza, se fotografía con un Marca y hace chascarrillos y gritos telúricos de personaje de los Quintero. La simpatía supone una gran inversión de tiempo. En la vida civil, los besos son el mayor obstáculo para el beso, los abrazos impiden que se geste un abrazo, las voces impiden que se hable. La simpatía posiblemente impide también otra política en la que se valoren más cosas aparte de la simpatía. Mañana nos vemos.

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