Breve respiro
La Bolsa española logró terminar la semana con un discreto signo positivo, después de ocho sesiones consecutivas de descensos. Los mercados se han tomado un respiro y han dejado de lado el temor de posibles subidas en los tipos de interés.
Los precios atractivos de la mayoría de los valores —muchos se encuentran con pérdidas en el presente ejercicio— fue la causa principal que animó a la entrada de dinero en la renta variable.
De todas formas, la desconfianza sigue muy presente en los mercados pues en la próxima semana se volverán a publicar una serie de datos importa...
La Bolsa española logró terminar la semana con un discreto signo positivo, después de ocho sesiones consecutivas de descensos. Los mercados se han tomado un respiro y han dejado de lado el temor de posibles subidas en los tipos de interés.
Los precios atractivos de la mayoría de los valores —muchos se encuentran con pérdidas en el presente ejercicio— fue la causa principal que animó a la entrada de dinero en la renta variable.
De todas formas, la desconfianza sigue muy presente en los mercados pues en la próxima semana se volverán a publicar una serie de datos importantes en EE UU que determinarán la marcha de la economía.
Es de destacar que mientras la Bolsa de Madrid recuperaba posiciones, la rentabilidad de los bonos a 10 años en el mercado de deuda cerraba con un nuevo máximo del año en el 5,06%. Según algunos analistas, la Bolsa no registró una mayor ganancia debido precisamente a este comportamiento alcista de la deuda. El euro siguió con su recuperación al terminar con un cambio oficial de 1,0694 dólares. La divisa europea se anotó una revalorización del 5,63% desde el pasado 12 de julio, en que marcó un mínimo anual.
Julio ha sido el peor mes del año para el mercado, pues el índice general madrileño marcó un descenso del 6,76%, mientras que en la semana la pérdida fue importante con 31, 15 puntos, un 3,56%.
El volumen de negocio en el mercado continuo se mantuvo en los mismos niveles que en los últimos días, con 141.720 millones de pesetas efectivas (851 millones de euros).