URBANISMO CULTURA RECHAZÓ EL DISEÑO PRESENTADO

Barberá negociará un nuevo proyecto para el solar de Jesuitas

El Ayuntamiento de Valencia está dispuesto a negociar con el empresario catalán Antoni Mestre una modificación del proyecto del hotel del solar de Jesuitas, que la Consejería de Cultura ha rechazado después de que el departamento municipal de Urbanismo le diera el vistobueno. El concejal delegado de Urbanismo, Miquel Domínguez, reconoció ayer que ha concertado para la próxima semana una cita con el empresario hotelero, quien ha amenazado con hacer efectiva la licencia de 1995 que le permitía erigir en el polémico solar un edificio de 19 alturas.

La Dirección General de Patrimonio ha rec...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

El Ayuntamiento de Valencia está dispuesto a negociar con el empresario catalán Antoni Mestre una modificación del proyecto del hotel del solar de Jesuitas, que la Consejería de Cultura ha rechazado después de que el departamento municipal de Urbanismo le diera el vistobueno. El concejal delegado de Urbanismo, Miquel Domínguez, reconoció ayer que ha concertado para la próxima semana una cita con el empresario hotelero, quien ha amenazado con hacer efectiva la licencia de 1995 que le permitía erigir en el polémico solar un edificio de 19 alturas.

La Dirección General de Patrimonio ha rechazado el proyecto presentado por Mestre para construir un hotel en el polémico solar de Jesuitas porque supera la volumetría permitida en el planeamiento -algo que no percibieron ni los servicios municipales ni los de la Consejería de Urbanismo- e invade espacios públicos. Los técnicos de Patrimonio señalaron en su dictamen,que fue avalado la pasada semana por la directora general del área, Carmen Pérez, que el proyecto incumple "un buen número de parámetros urbanísticos" y plantea "una propuesta arquitectónica acultural, formalmente banal y materialmente incoherente". El rechazo de la Dirección General de Patrimonio se venía a sumar al de la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, quien desde el primer momento mostró su rechazo -por cuestiones estéticas- al proyecto de Mestre, que prevé construir un edificio acristalado de 10 alturas. Tras la resolución de la Generalitat, el empresario catalán se ha dirigido al citado departamento autonómico advirtiendo de que si no le autorizan a llevar a cabo el último proyecto, hará efectiva la licencia que obtuvo en 1995, que le permitía erigir un edificio de 19 plantas y a la que renunció tras firmar un convenio con el Ayuntamiento. El delegado de Urbanismo, Miquel Domínguez, confirmó ayer que ha concertado para la próxima semana una cita con el empresario catalán, aunque no quiso extenderse sobre la posible negociación para solucionar el asunto. Mientras, los socialistas mostraron su perplejidad por el hecho de que los servicios municipales de Urbanismo no detectaran el exceso de volumetría del proyecto presentado. Por su parte, el colectivo Salvem el Botànic tachaba de "farol" la amenaza del empresario catalán e instaba de nuevo a rescatar el terreno.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En