Los orangistas del Ulster planean una gran concentración en Belfast
La protestante Orden de Orange, airada por la prohibición del lunes de cruzar por un barrio católico en el sur de Belfast, anunció ayer que el próximo lunes realizará una gran manifestación en la zona. Lo que se busca es una concentración de decenas de miles de unionistas el 12 de julio, el punto álgido de la temporada de las marchas protestantes, en un parque próximo a este barrio católico de la capital norirlandesa. Un portavoz de la Orden de Orange presentó la concentración como un acto de solidaridad con sus correligionarios, a los que se prohibió atravesar Lower Ormeau Road. Pero Gerard ...
La protestante Orden de Orange, airada por la prohibición del lunes de cruzar por un barrio católico en el sur de Belfast, anunció ayer que el próximo lunes realizará una gran manifestación en la zona. Lo que se busca es una concentración de decenas de miles de unionistas el 12 de julio, el punto álgido de la temporada de las marchas protestantes, en un parque próximo a este barrio católico de la capital norirlandesa. Un portavoz de la Orden de Orange presentó la concentración como un acto de solidaridad con sus correligionarios, a los que se prohibió atravesar Lower Ormeau Road. Pero Gerard Rice, un líder vecinal, calificó la propuesta como un "acto de intimidación". Los orangistas realizan cada verano cientos de marchas en el Ulster para celebrar su protestantismo y conmemorar su triunfos de hace tres siglos sobre los católicos irlandeses. El día clave es el 12 de julio, anivesario de la victoria de 1690 de Guillermo de Orange sobre el rey católico Jaime II en la batalla de Boyne. Si las autoridades locales dan el visto bueno a la prevista concentración se habrá creado un nuevo y gran problema de seguridad. Las tropas británicas y la policía de la provincia están ya en alerta para que las otras marchas se desarrollen pacíficamente. El anuncio de la concentración del 12 de julio se produce en un ambiente de alta tensión política como consecuencia de los intentos de los Gobiernos de Londres y Dublín para conseguir que católicos y protestantes cumplan con la fecha del 15 de julio como tope para alcanzar un acuerdo que permita la formación de un Gobierno en la provincia. Todo gira en torno a si el IRA está dispuesto a entregar las armas.