Cartas al director

Manía

Fui con un amigo a visitar a un chico minusválido con una grave enfermedad. Casi no podíamos comunicarnos con él. Pero en la mesa donde estaba había un ejemplar de su diario abierto por las páginas deportivas.Comentamos el mal momento actual del equipo de fútbol del Real Madrid. Al enfermo se le iluminó la cara y empezó a sonreír; resultó ser un forofo del balón. Seguí hojeando el periódico... por primera vez me caía bien. Pero... ¡venga, hombre!... otra sandez sobre el Opus Dei, y la foto de su prelado -un hombre que reza por los que le insultan- desdibujada... como la visión del periodista. ...

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Fui con un amigo a visitar a un chico minusválido con una grave enfermedad. Casi no podíamos comunicarnos con él. Pero en la mesa donde estaba había un ejemplar de su diario abierto por las páginas deportivas.Comentamos el mal momento actual del equipo de fútbol del Real Madrid. Al enfermo se le iluminó la cara y empezó a sonreír; resultó ser un forofo del balón. Seguí hojeando el periódico... por primera vez me caía bien. Pero... ¡venga, hombre!... otra sandez sobre el Opus Dei, y la foto de su prelado -un hombre que reza por los que le insultan- desdibujada... como la visión del periodista. ¿Por qué esta manía?... ¿Por qué esta obsesión?.. Y no pude cambiar mi opinión sobre su periódico.-

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