El PSOE culpa a Aznar de "la deslealtad democrática y constitucional" del PNV

El PSOE responsabiliza directamente al presidente del Ejecutivo, José María Aznar, de haber dejado "suelto" al PNV en su avance hacia la "deslealtad constitucional y democrática", y todo a cambio de cinco votos en el Congreso de los Diputados. Los socialistas denuncian que el PP no se atreva a poner coto a las demandas de los nacionalistas, y alertan sobre una grave situación política que no se había dado nunca en los 14 años de Gobiernos del PSOE. Éste es el análisis que ayer realizó la comisión ejecutiva federal, durante cuya reunión el presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodr...

El PSOE responsabiliza directamente al presidente del Ejecutivo, José María Aznar, de haber dejado "suelto" al PNV en su avance hacia la "deslealtad constitucional y democrática", y todo a cambio de cinco votos en el Congreso de los Diputados. Los socialistas denuncian que el PP no se atreva a poner coto a las demandas de los nacionalistas, y alertan sobre una grave situación política que no se había dado nunca en los 14 años de Gobiernos del PSOE. Éste es el análisis que ayer realizó la comisión ejecutiva federal, durante cuya reunión el presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, preguntó en alto "quién paga el sustento de todos los liberados de ETA" y dio por seguro que Aznar lo sabe.

El candidato a la Presidencia del Gobierno, José Borrell, ofrecerá hoy al jefe del Ejecutivo, en su primera entrevista, la mano del PSOE para llegar a un consenso "inteligente y responsable" en esta materia, aunque las cosas deben cambiar porque hasta ahora los socialistas sienten que sólo se les quiere para "aplaudir" y no para aunar posiciones. No es casualidad que los socialistas y Borrell hayan decidido que la primera reunión de éste con el presidente del Gobierno vaya precedida de una declaración de intenciones dura para poner de manifiesto que el primer partido de la oposición está muy insatisfecho con la actuación del Gabinete de Aznar en el proceso de paz y del trato que dispensa a los socialistas en esta misma materia.

En la reunión de la ejecutiva federal de ayer Borrell expuso a sus compañeros sus planteamientos para la entrevista de hoy, que también incluirá la negociación de los fondos europeos, a lo que siguió un vivo debate sobre lo que se debe "exigir a Aznar". Consenso sí, pero con condiciones, y, desde luego, no lo habrá si el Ejecutivo entiende la política de acuerdos como hasta ahora.

Los socialistas se sienten "más o menos informados" de lo que hace el Gobierno pero quisiera "una asunción común de posiciones y no sólo aplaudir", dijo ayer el secretario general del PSOE, Joaquín Almunia. El jefe del Ejecutivo, no obstante, ya sabe por donde puede ir la actitud de José Borrell, ya que hace dos semanas el candidato socialista le envió el documento sobre el proceso de paz que la ejecutiva había aprobado.

Los socialistas se muestran igualmente duros con el partido de Xabier Arzalluz que con el presidente Aznar, a quien acusan de "dejar suelto al PNV por atar sus cinco votos en Madrid", en palabras de Almunia. "El Gobierno hasta ahora no ha podido o no ha sabido decir al PNV que se comprometa con la lealtad democrática, con la lealtad constitucional, y eso es responsabilidad de Aznar", insistió el secretario general de los socialistas.

Supeditados a HB

En la reunión interna la dureza fue todavía mayor, aunque los socialistas no se limitaron a criticar a unos y a otros, sino que por encima del reproche sobresalió la preocupación por la deriva del PNV hacia posiciones radicales "supeditadas a HB y ETA". Dentro y fuera de su asamblea los socialistas proclamaron que en los años de gobiernos socialistas los nacionalistas vascos no tuvieron este comportamiento.A la línea de remachar la crítica se unió el presidente extremeño, Juan Carlos Rodríguez Ibarra, que ayer almorzó con Joaquín Almunia dentro de la ronda de conversaciones que el secretario general del PSOE está manteniendo con todos los candidatos autonómicos para saber cómo están las cosas en cada región y qué necesitan de la ejecutiva federal.

Antes, en Radio Nacional de España, Rodríguez Ibarra había dicho que se corre el riesgo de que ETA "consiga sin matar lo que no consiguió matando". De la entrevista de hoy de Borrell con Aznar desearía que saliera la posición firme del presidente del Gobierno diciendo "dónde se planta en esta partida de póquer, en el que el nacionalismo avanza y el señor Aznar no deja de ceder".

A continuación se mostró escéptico. "Me temo que en la negociación con ETA no haya límites, porque Aznar no está dispuesto a fracasar, ya que ha asumido el papel protagonista y eso hace pensar que para tener éxito no pondrá límites a las exigencias". Con el mismo lenguaje que empleó la ejecutiva el político extremeño pidió que Aznar, a su vez, inste a los nacionalistas a ser "leales con la Constitución y el estatuto vasco".

Puntos de encuentro

El candidato a la Junta de Extremadura, en tono enérgico, aseguró que las cosas "van muy mal" en España, porque Aznar "administra pero no gobierna". Luego se preguntó "quién da de comer a la banda terrorista, quién paga a ETA, porque si tiene que mantener a 1.000 personas, necesita 5.000 millones al año". "A lo mejor en el País Vasco se sabe algo de esto, y quizá alguna entidad financiera, y yo creo que Aznar sabe algo de quién paga a ETA", dijo un tanto misteriosamente. Por su parte, Aznar, manifestará hoy a Borrell que por la vía de los ataques no será posible el consenso en los temas de Estado, informa Luis R. Aizpeolea. Ayer, desde La Moncloa se insistía en tratar de "buscar puntos de encuentro" con Borrell, pese a que se tenía conocimiento de que en la Comisión Ejecutiva del PSOE, celebrada por la mañana, se responsabilizó a Aznar de la deriva del PNV al frentismo nacionalista y al soberanismo. En La Moncloa sorprendió este pronunciamiento en la víspera de esa entrevista, pero se optó por mantener una actitud conciliadora y de que la reunión sirva para "encontrar puntos de acuerdo".

No obstante, Aznar no ha sido insensible a estos ataques. Cuando hace un mes, el candidato socialista dijo que Aznar estaba desbordado por los nacionalistas, éste respondió que Borrell estaba "alejado de la realidad". Cuando hace dos semanas, el líder socialista dijo que el proceso de paz en el País Vasco no funcionaba, Aznar replicó que "algunos disparan con sus declaraciones contra el proceso de paz". Se espera que de la reunión de hoy salga algún acuerdo sobre las reglas de juego entre ambos.