Córdoba acoge a los finalistas del Premio Nacional de Grabado

La sede de la Diputación de Córdoba acoge hasta el 20 de febrero las 52 obras finalistas del Premio Nacional de Grabado 1998 que por sexto año convoca la Calcografía Nacional con la colaboración de Philip Morris España. De todas las obras expuestas, destaca la galardonada con el primer premio otorgado a Paisaje de guerra en África, del argentino Óscar Manesi, así como el reconocimiento a Eduardo Chillida por su actividad como grabador durante 1997. También, el malagueño Manuel Franquelo ha recibido premio "por las innovaciones aportadas al arte gráfico". Esta exposición estará esta única vez ...

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La sede de la Diputación de Córdoba acoge hasta el 20 de febrero las 52 obras finalistas del Premio Nacional de Grabado 1998 que por sexto año convoca la Calcografía Nacional con la colaboración de Philip Morris España. De todas las obras expuestas, destaca la galardonada con el primer premio otorgado a Paisaje de guerra en África, del argentino Óscar Manesi, así como el reconocimiento a Eduardo Chillida por su actividad como grabador durante 1997. También, el malagueño Manuel Franquelo ha recibido premio "por las innovaciones aportadas al arte gráfico". Esta exposición estará esta única vez en Andalucía ya que posteriormente irá a San Sebastián, Ibiza y Toledo. El responsable del Area de Cultura de la Diputación, Matías González, destacó, en el acto de presentación, que con esta exposición se ofrece una panorámica del grabado español actual. Según Juan Carrete, director de la Calcografía Nacional, este premio "es la mejor visión antológica de lo que en este momento se está haciendo en España". "El grabado es una de las manifestaciones artísticas que siempre está en una constante evolución, no sólo estilística a lo largo del tiempo sino también de tipo técnico", dijo Carrete. En la exposición de las obras seleccionadas al Premio Nacional de Grabado 1998 hay obras que utilizan desde la técnica del grabado en madera, el calcográfico y aspectos de la fotomecánica o de tecnología digital. Paisaje de guerra en África goza, según Carrete, "de esa singularidad de ser a la vez una obra con fondo tradicional al aguatinta que incorpora además el fotograbado". Óscar Manesi explica que este grabado forma parte de una serie iniciada en 1994 centrada en el continente con el objetivo de que, según dijo, "los gobiernos se replanteen qué está pasando con África".

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