Aznar anunciará hoy el inmediato traslado de 21 presos de ETA a cárceles de la Península

El presidente del Gobierno, José María Aznar, anunciará hoy, previsiblemente y según fuentes gubernamentales, el traslado a la Península de un "grupo cualitativo" de 21 presos de ETA que cumplen condena en cárceles de Canarias, Baleares, Ceuta y Melilla.Salvo cambios de última hora, la previsión gubernamental es que el presidente del Ejecutivo haga una nueva declaración en la que, además de este anuncio, se pronunciará sobre la marcha del proceso de paz. La anterior declaración de Aznar fue el 3 de noviembre, y en ella reveló escuetamente el inicio de contactos entre el Gobierno y ETA. El jefe...

El presidente del Gobierno, José María Aznar, anunciará hoy, previsiblemente y según fuentes gubernamentales, el traslado a la Península de un "grupo cualitativo" de 21 presos de ETA que cumplen condena en cárceles de Canarias, Baleares, Ceuta y Melilla.Salvo cambios de última hora, la previsión gubernamental es que el presidente del Ejecutivo haga una nueva declaración en la que, además de este anuncio, se pronunciará sobre la marcha del proceso de paz. La anterior declaración de Aznar fue el 3 de noviembre, y en ella reveló escuetamente el inicio de contactos entre el Gobierno y ETA. El jefe del Gobierno aprovechará el anuncio del acercamiento de los presos para hacer un balance desde sus últimas manifestaciones.

El acercamiento de 21 presos de la organización terrorista será la primera medida de entidad que adopte el Gobierno en política penitenciaria tras la declaración de la tregua indefinida de ETA, el pasado 16 de septiembre. Pocos días antes de la celebración de las elecciones autonómicas vascas del 25 de octubre, el Ministerio del Interior trasladó a cuatro presos enfermos a cárceles del País Vasco. Fue un primer gesto tímido del Gobierno de respuesta al alto el fuego.José María Aznar, en su declaración de La Moncloa del pasado 2 de octubre, anunció como eje central de su política ante la tregua de ETA una flexibilización de la política penitenciaria del Ejecutivo a cambio de que la banda terrorista diera pasos significativos en el proceso de paz. Con este primer acercamiento de 21 presos de ETA, el Gobierno pretende ofrecer un gesto de compromiso con el incipiente proceso de paz que sirva para animar a la banda a que anuncie el esperado cese definitivo de las armas.

El Ejecutivo quiere dejar claro que esta decisión es, por tanto, un gesto de compromiso para facilitar el proceso y no el resultado de la presión de los partidos nacionalistas en el País Vasco. Ayer mismo, el PNV reclamó al presidente del Gobierno un acercamiento de presos antes de fin de año. En su comunicado, el PNV instaba al Gobierno a que "cuanto antes se den los pasos oportunos para que se materialice el acercamiento, apoyado por el Parlamento Vasco y reclamado por la inmensa mayoría del pueblo vasco". "Si este deseo general siguiera siendo despreciado por el Gobierno, el PNV, junto a todos los demás partidos y solicitantes de esta medida, se vería obligado a denunciar esta conducta que atenta contra la ley penitenciaria, el derecho a las familias y contra un mínimo sentido de humanidad", añadía el PNV.

Según fuentes gubernamentales, también se espera que el Gobierno haga algún pronunciamiento sobre los contactos indirectos que ha mantenido con el llamado Movimiento de Liberación Nacional Vasco (MLNV). En medios próximos a Herri Batasuna se afirma que el secretario general del sindicato abertzale LAB, Rafael Díez Usabiaga, conectó semanas atrás con algún enviado del Gobierno para explorar las posibilidades de paz.

Fuentes gubernamentales afirman que el equipo de Aznar trabaja con la previsión de que hoy se realice el pronunciamiento oficial. El ministro del Interior, Jaime Mayor, tiene previsto reunirse hoy por la mañana con representantes del PSOE para adelantarles el análisis del Gobierno sobre la situación y las medidas que va a anunciar. A lo largo de las últimas tres semanas, Mayor ha mantenido frecuentes contactos con los representantes de los grupos parlamentarios de la oposición.

Mayor: "Lo decidirá Aznar"

Hace 10 días, los partidos de la oposición tenían la impresión de que se había producido un "enfriamiento" en el plan de acercamientos de presos del Gobierno. Se desconoce qué es lo que ahora ha aconsejado a Aznar a reactivarlo. Tampoco ha trascendido si los 21 reclusos etarras serían trasladados todos a la vez, ni los penales de la Península en que serán internados. No obstante, diversas fuentes barajan la posibilidad de que sean cárceles de Andalucía y Castilla-La Mancha. Pese a que fuentes gubernamentales daban anoche por previsible que el presidente del Gobierno haría pública hoy su decisión, Mayor Oreja manifestaba horas antes en Pamplona que todavía "no hay ninguna novedad" respecto al acercamiento de presos. El ministro insistió, sin embargo, en que, en cualquier caso, éste es un proceso "que lidera y dirige el presidente del Gobierno y, por tanto, le corresponderá a él decidir el momento oportuno para anunciar lo que crea conveniente". El ministro pidió "la necesaria discreción" a la hora de hablar de cuestiones como el acercamiento de presos y afirmó que "el presidente del Gobierno tiene que ser su portavoz". "La sociedad debe estar tranquila, ya que el Gobierno está tratando esta situación con prudencia y cautela, pero sobre todo con esperanza", agregó.El presidente del Partido Popular en Euskadi, Carlos Iturgaiz, declaró en Cartagena (Murcia) que "quien administra los tiempos en política penitenciaria es el Gobierno de la nación". Tras pedir a los presos etarras que dejen atrás su "inmovilismo", les invitó a acogerse a "los beneficios penitenciarios y a la reinserción".

En cuanto a las amenazas de las que en los últimos días están siendo objeto diferentes personalidades, entre ellas varios cargos electos del PP en el País Vasco, Mayor manifestó que "la amenaza y la coacción lamentablemente son la expresión de una subcultura de la violencia que está demasiado desarrollada en el País Vasco y Navarra". En opinión del ministro, estos hechos "se han producido cuando ETA ha matado y cuando ha dejado de matar, por lo que no hay que hacer interpretaciones tácticas o estratégicas; son más bien, y lamentablemente, la consecuencia de generaciones de intolerancia".