Otegi dice que el traslado de presos es el "termómetro" de la voluntad del Gobierno

Arnaldo Otegi, portavoz de HB y parlamentario de Euskal Herritarrok, exigió ayer a las puertas de la cárcel donostiarra de Martutene, donde cumplen condena varios de sus predecesores en la Mesa Nacional de la coalición, el traslado de todos los presos de ETA al País Vasco y su excarcelación para que participen en el proceso de paz. Ese acercamiento de los reclusos será el "primer termómetro" de la voluntad del Gobierno en el proceso de negociación, dijo Otegi. "Y eso aún no lo hemos visto", añadió. Para el líder de la coalición abertzale la decisión del Ejecutivo de autorizar contactos con ET...

Arnaldo Otegi, portavoz de HB y parlamentario de Euskal Herritarrok, exigió ayer a las puertas de la cárcel donostiarra de Martutene, donde cumplen condena varios de sus predecesores en la Mesa Nacional de la coalición, el traslado de todos los presos de ETA al País Vasco y su excarcelación para que participen en el proceso de paz. Ese acercamiento de los reclusos será el "primer termómetro" de la voluntad del Gobierno en el proceso de negociación, dijo Otegi. "Y eso aún no lo hemos visto", añadió. Para el líder de la coalición abertzale la decisión del Ejecutivo de autorizar contactos con ETA es una mera "operación cosmética". "Que nosotros sepamos no se ha llevado a cabo", precisó. Otegi defendió la excarcelación de los penados con el argumento de que "tienen todo el derecho a participar en el diseño y desarrollo de este proceso democrático que va a conducir a este país a otro escenario".Dos centenares de personas se concentraron frente a la prisión de Martutene pidiendo la libertad de la Mesa Nacional de HB y la de todos los reclusos etarras. Concentraciones similares se celebraron en las otras dos prisiones vascas (la de Basauri, en Vizcaya, y la de Nanclares, en Álava). En Pamplona, unas 1.500 personas se manifestaron exigiendo la libertad de los presos de la banda, informa Mikel Muez.

Mientras, el presidente del Gobierno, José María Aznar, ha recalcado que si se vuelve a las armas, la responsabilidad será de quien las empuñe y "de nadie más". En una entrevista con El Suplemento Semanal, dominical del Grupo Correo, Aznar afirma que no va a pagar "un precio político por la paz" y que la discreción es básica en este proceso.