Cartas al director

Fe y razón

En EL PAÍS del pasado 18 de octubre, que leo con verdadero cariño todos los domingos, encontré el artículo de referencia de Manuel Vicent. No sé de dónde se ha sacado lo del árbol de mostaza, pues en las dos biblias que tengo, la Bover Cantera y la Nácar Colunga, se habla de la mostaza como de una hortaliza.No veo nada sorprendente en que se metan muchos pájaros en un arbusto pequeño. Yo los he visto, por lo menos los suficientes para el deleite de cualquier ser medianamente poético. Con respecto a los efectos que el pontificado del pobre Juan XXIII tuvo en las misas pop, en la rebaja de la te...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

En EL PAÍS del pasado 18 de octubre, que leo con verdadero cariño todos los domingos, encontré el artículo de referencia de Manuel Vicent. No sé de dónde se ha sacado lo del árbol de mostaza, pues en las dos biblias que tengo, la Bover Cantera y la Nácar Colunga, se habla de la mostaza como de una hortaliza.No veo nada sorprendente en que se metan muchos pájaros en un arbusto pequeño. Yo los he visto, por lo menos los suficientes para el deleite de cualquier ser medianamente poético. Con respecto a los efectos que el pontificado del pobre Juan XXIII tuvo en las misas pop, en la rebaja de la teología y en el propio concepto del infierno, tampoco entiendo de qué habla. No ha habido una época así en la historia de la Iglesia moderna, en cuanto a profundidad artística, social y teológica, y creo que lo de la liturgia pop y el cristianismo ramplón más bien son un fruto reciente, desde luego de este pontificado. Yo lo llamaría el cristianismo en manos de los horteras y de los yuppies, que también son hijos de Dios, aunque no los únicos ni los más, gracias a Dios. Pero el tono de sarcasmo del señor Vicent creo que es

Pasa a la página siguiente

Viene de la página anterior

Haz que tu opinión importe, no te pierdas nada.
SIGUE LEYENDO

injustamente ofensivo, sobre todo para gente como yo, católico y de izquierda, a quien sí le deslumbra la parábola del grano de mostaza y le mantiene vigilante en medio de tanto conformismo, de tanto culto a la personalidad y de tanta ramplonería espiritual y social.- . .

Archivado En