La lluvia atasca los accesos de la capital y causa tres accidentes mortales

La lluvia caída ayer originó un jornada negra en las carreteras madrileñas. Tres personas fallecieron, ocho resultaron heridas de gravedad y nueve leves en 60 accidentes de circulación. Además, el agua, que en ningún momento alcanzó niveles torrenciales, causó atascos en todos los accesos a Madrid (el mayor, de 20 kilómetros, en la N-II). Los bomberos realizaron más de 50 salidas y los servicios de urgencia atendieron más de 1.000 avisos.

El primer aviso del desbarajuste en que se iba hundir Madrid apareció con el alba. La presencia de la lluvia (hoy se espera que siga cayendo) indujo a...

Suscríbete para seguir leyendo

Lee sin límites

La lluvia caída ayer originó un jornada negra en las carreteras madrileñas. Tres personas fallecieron, ocho resultaron heridas de gravedad y nueve leves en 60 accidentes de circulación. Además, el agua, que en ningún momento alcanzó niveles torrenciales, causó atascos en todos los accesos a Madrid (el mayor, de 20 kilómetros, en la N-II). Los bomberos realizaron más de 50 salidas y los servicios de urgencia atendieron más de 1.000 avisos.

El primer aviso del desbarajuste en que se iba hundir Madrid apareció con el alba. La presencia de la lluvia (hoy se espera que siga cayendo) indujo al uso masivo de los coches. Este factor prolongó la hora punta hasta las once de la mañana.La M-30 y la M-40 estuvieron atascadas a lo largo de todo el día. En el interior de la ciudad hubo retenciones de más de una hora en vías centrales como el paseo de la Castellana, Cuatro Caminos y avenida de América. Las retenciones y la lluvia provocaron un aumento del nerviosismo y también de las colisiones.

A las ocho de la mañana las retenciones de entrada alcanzaban 10 kilómetros en la N-I (Burgos), 16 en la N-VI (A Coruña), 20 en la N-II (Barcelona), 12 en la N-IV (Andalucía) y 9 en la carretera de Extremadura. En el caso de la carretera de Barcelona y la carretera de Andalucía el atasco llegó a prolongarse más de siete horas.

Este colapso fue también permanente en la M-40, que sufrió retenciones de hasta 18 kilómetros entre la carretera de Toledo y los recintos feriales del Ifema. En la M-30 la caravana de coches aumentó con una cadena de accidentes. Este caos generalizado en toda la ciudad se reprodujo por la tarde cuando las lluvias volvieron a a aparecer.

El accidente más grave ocurrió a las 18.00 en la N-III. En medio de un tremendo aguacero, un camión arrolló a ocho vehículos parados en la calzada a causa de un accidente menor en el kilómetro 27 de la autovía en dirección de entrada a Madrid.

El aparatoso choque dejó un reguero de sangre en el pavimento. Una persona falleció, tres quedaron heridas muy graves y las ambulancias del 061, Cruz Roja y el Sercam trasladaron a otras cinco personas a diferentes hospitales madrileños. Uno de los conductores se salvó "de milagro". El camión pasó por encima de su coche cuando se acababa de bajar. "Hoy he vuelto a nacer, sí. Si estoy dentro del coche el camión me revienta", afirmó.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

La Guardia Civil de Tráfico culpó también al camión volquete del terrible golpe. "Pensamos que por despiste o por la lluvia no ha podido frenar y se ha llevado a todos los coches por delante". El herido más grave del percance fue evacuado por el helicóptero del Sercam al hospital Doce de Octubre. Falleció al ingresar en el centro, según el 061. El conductor del camión resultó herido grave. Este percance provocó retenciones de cinco kilómetros mientras la Guardia Civil se afanaba en retirar los coches.

40 accidentes en Madrid

El segundo percance mortal ocurrió a las dos de la madrugada del martes en la M-40. Un hombre de 35 años perdió la vida al perder el control del vehículo que conducía, según el Samur. En Alcalá de Henares otra persona murió atropellada en el casco urbano, según la policía local.En el interior de la ciudad el Samur contabilizó 40 accidentes de tráfico, el doble que un día normal. El peor percance sobrevino a media tarde en el paseo de la Castellana, según la Policía Municipal. Un autobús de la EMT se estampó contra un árbol a causa de la lluvia. Hubo tres heridos leves.

Los efectos de la llvuia no sólo se hicieron sentir en el tráfico, sino que se multiplicaron en todos los órdenes. Los parques de bomberos trabajaron durante todo el día. En su centralita se contabilizaron medio centenar de avisos por caída de cornisas o balsas de agua. Los bomberos de la Comunidad de Madrid también trabajaron sin cesar.

Archivado En