Detenidos cuatro jóvenes por dar una paliza a un trabajador africano en Sant Feliu de Codines

La policía de Sant Feliu de Codines (Vallès Oriental) detuvo ayer a cuatro jóvenes, de un grupo de ocho o diez, que la noche del miércoles dio una paliza a Kabba Barrow, un ciudadano de Gambia de 35 años, de raza negra, trabajador de los servicios de limpieza. Uno de los detenidos, David U.V., de 17 años, permanece en prisión al tener antecedentes penales. Los otros son Gerard R.R., de 15, Iván C.M., de 21, y Oriol A.F., de 17. Todos ellos pasarán hoy a disposición del juzgado de Granollers. Los jóvenes racistas se ensañaron con Kabba mientras éste limpiaba una calle del pueblo.

Los hec...

La policía de Sant Feliu de Codines (Vallès Oriental) detuvo ayer a cuatro jóvenes, de un grupo de ocho o diez, que la noche del miércoles dio una paliza a Kabba Barrow, un ciudadano de Gambia de 35 años, de raza negra, trabajador de los servicios de limpieza. Uno de los detenidos, David U.V., de 17 años, permanece en prisión al tener antecedentes penales. Los otros son Gerard R.R., de 15, Iván C.M., de 21, y Oriol A.F., de 17. Todos ellos pasarán hoy a disposición del juzgado de Granollers. Los jóvenes racistas se ensañaron con Kabba mientras éste limpiaba una calle del pueblo.

Los hechos ocurrieron sobre las 23.30 horas del miércoles. En el momento de la agresión, Barrow, vecino de Sant Feliu de Codines y trabajador de la empresa de recogida de basura BFI, que tiene subcontratado este servicio con el ayuntamiento, estaba trabajando en la zona de la Font dels Albers. Los jóvenes le increparon repetidamente hasta que, finalmente, le atacaron por la espalda, lo derribaron y le propinaron golpes y patadas. Barrow fue ayudado por un compañero, que intentó separar a los agresores de su víctima. Los jóvenes se dieron a la fuga. La víctima fue ingresada en el servicio de Urgencias del Hospital General de Granollers con hematomas y lesiones en un brazo, pero fue dada de alta la misma noche "porque sólo sufría contusiones", según fuentes del centro sanitario, que le han recomendado "una semana de reposo". La concejala de Gobernación del Ayuntamiento de Sant Feliu de Codines, Pilar Borrell, ha explicado que "la agresión se produjo después que Barrow dijera a los detenidos, que lo estaban insultando, que le dejaran trabajar en paz". Según Borrell, se trata de un grupo de ocho o diez jóvenes del que ya se tenían noticias en el ayuntamiento, ya que desde hace un año insultan y cometen actos xenófobos contra la comunidad magrebí de Sant Feliu de Codines. El verano pasado ya quemaron la motocicleta de un inmigrante. Los cuatro detenidos son de Sant Feliu, pero hay otros de localidades cercanas como Sant Quirçe del Vallès o La Llagosta así como algunos veraneantes de Barcelona. Según la concejala, se trata de "racismo puro", si bien añade que "no son skins (cabezas rapadas), sino ultras". Borrell explicó que mientras la policía detenía a unos, el resto se dedicó a hacer pintadas en los muros. El pueblo está lleno de estas pintadas que proclaman "Arriba España", "Africanos, bienvenidos al infierno", "Rudolf Hess vive", y otros lemas neonazis y racistas. Según la concejala, hacía días que los jóvenes increpaban a los dos trabajadores, pero "nunca antes habían llegado a la agresión física". Sin embargo, varios vecinos del municipio aseguraron que el incidente contra el trabajador gambiano ha sido "un episodio más de las constantes peleas callejeras que protagonizan estos jóvenes", a los que califican de skins neonazis, un grupo de muchachos muy jóvenes, la mayoría menores de edad, que se reúnen en un parque cercano a la Font dels Alvars. La policía local detuvo, poco después de la agresión, a uno de los jóvenes. Éste dio los nombres de los demás integrantes del grupo, pero sólo se pudo detener a otros tres. Todos ellos fueron conducidos las 4.30 de la madrugada a las dependencias de la Guardia Civil. PASA A LA PÁGINA 4