El precio de la vivienda se dispara en Valencia y se estanca en Alicante. Alicante crece por debajo del 1% en el último año, según el estudio
La frenética construcción de viviendas en la Comunidad Valenciana no consigue abaratar los precios, pese a que los promotores defienden esta receta como una de las medidas para hacer más accesible a una familia la compra de un piso. En los últimos 12 meses el coste del metro cuadrado ha subido una media del 3,5% en Alicante, Castellón y Valencia, según un estudio encargado por el Consell a la consultora Emer. En las conclusiones se destaca el tirón de Valencia, más de un 6,4%, y el estancamiento de Alicante, cuya subida no llega al 1%.
Castellón, una de las ciudades más baratas de Españ...
La frenética construcción de viviendas en la Comunidad Valenciana no consigue abaratar los precios, pese a que los promotores defienden esta receta como una de las medidas para hacer más accesible a una familia la compra de un piso. En los últimos 12 meses el coste del metro cuadrado ha subido una media del 3,5% en Alicante, Castellón y Valencia, según un estudio encargado por el Consell a la consultora Emer. En las conclusiones se destaca el tirón de Valencia, más de un 6,4%, y el estancamiento de Alicante, cuya subida no llega al 1%.
Castellón, una de las ciudades más baratas de España, también ha subido sus precios en el último año un 3,56%, según el mismo estudio de Emer. Pese al crecimiento, ninguna de las tres ciudades se acerca a las 150.000 pesetas por metro cuadrado, requisito necesario para entrar en el club de las 10 ciudades más caras de España, según los últimos datos de la empresa Sociedad de Tasación, hechos públicos el pasado mes de junio. Esta misma sociedad ya recomendó a principios de año que el sector debía mantenerse alerta ante un posible calentamiento de los precios durante 1998, una previsión que lleva camino de cumplirse. Con estas cifras puede verse que la construcción de vivienda y el abaratamiento del precio final no van de la mano, lo que demuestra que construir vivienda como se está haciendo en las tres capitales de provincia valencianas no presupone de origen una ventaja para el comprador, pese a que así lo defienden las asociaciones de promotores y de constructores. Ahora mismo está en marcha la construcción de unas 50.000 viviendas que se acometerán en los próximos años. Ahora mismo comprar un piso en Alicante, Valencia y Castellón es más caro que hace año, pese a la gran oferta de vivienda que tiene la Comunidad Valenciana, según el estudio de la consultora Emer encargado por el Consell y que está en manos del director general de Vivienda de la Consejería de Obras Públicas, Transportes y Urbanismo, José María García Zarco. En todo caso el progresivo descenso de los tipos de interés hacen más favorable la adquisición de una vivienda que hace algunos años. En el conjunto de las tres ciudades el precio medio ha aumentado en los últimos 12 meses un 3,5%, por encima del IPC -que fue inferior al 3% en 1997. Alicante es con diferencia la ciudad que registra un menor crecimiento, sólo un 0,72%, muy por debajo de las otras dos capitales de provincia. Sin embargo, con el tirón de Valencia y Castellón, se ha elevado considerablemente la media del último año. En todo caso la actividad de la construcción viene provocando diferentes reacciones. Si las constructoras se han visto sobrepasadas y en algunos casos no han encontrado mano de obra en la Comunidad Valenciana -han tenido que recurrir a personas de otras localidades españolas e incluso de paíseses del extranjero- desde la Consejería de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes (Coput) se les ha criticado porque se "vuelve a poner de manifiesto que el sector no ha estado preparado ante el nuevo boom urbanístico", según señaló el responsable de vivienda, José María García Zarco, en una visita que hizo a empresarios de Alicante. Una explosión en el sector que ya se produjo en los últimos años ochenta y tuvo unas consecuencias nefastas a principios de esta década. García Zarco, en la misma visita a constructores, les pidió prudencia a la hora de la nueva creación de vivienda y les sugirió que tal vez sería bueno llegar a fórmulas para frenar el alto número de nuevas construcciones que están en marcha. Zarco explicaba gráficamente la respuesta que le dio el empresariado ante una posible limitación en las nuevas construcciones: "Sí, ¿pero quién es el primero en dejar de hacer casas?"... En todo caso, según los responsables de vivienda de la consejería de Obras Públicas, factores diversos como la calidad de los materiales, entre otros, pueden haber ayudado al crecimiento de los precios. Media nacional Un tirón que se ha producido especialmente en Valencia, donde el crecimiento ha sido de un 6,48%, según los datos oficiales que maneja el departamento de Obras Públicas, Transportes y Urbanismo, que dirige José Ramón García Antón. En Valencia, según el estudio, hace ahora un año el precio de la vivienda costaba 120.300 pesetas por las 128.100 que cuesta en la actualidad. En Castellón el crecimiento ha pasado de las 125.100 pesetas a las 128.000 actuales, lo que supone un incremento del 3,56%. Curiosamente Alicante es la ciudad que en los últimos doce meses menos ha crecido en precios. El metro cuadrado ha pasado de las 110.500 pesetas a las 111.300, lo que supone un 0,72% más que hace un año. Según un estudio hecho público recientemente por una empresa dedicada a la tasación de viviendas, Sociedad de Tasación, ninguna de las tres ciudades de la Comunidad Valenciana está entre las 10 más caras de España, ranking que lidera Barcelona y a la que siguen Madrid, San Sebastián, Vitoria y Bilbao. Ninguna de las 10 ciudades baja de las 150.000 pesetas por metro cuadrado. De hecho, la media nacional por metro cuadrado es de 174.000 pesetas. En el mismo estudio de esta compañía de tasación Castellón figuraba como la segunda ciudad más barata de España.