Una mujer envenena a su marido con barbitúricos y se entrega a la policía

Isabel S. M., de 58 años, que padece esquizofrenia, se entregó el pasado miércoles en una comisaría de Barcelona y se acusó de haber envenenado a su marido con barbitúricos. El presunto parricidio se cometió el miércoles en el domicilio familiar, situado en la urbanización Ca l"Estapé, de Lliçà d"Amunt, población situada a unos 30 kilómetros al norte de Barcelona. La mujer se entregó horas después de fallecer su marido, Antonio Torres Pereira, también de 58 años.Torres fue trasladado al hospital de Granollers en estado grave. Según explicó su esposa a los médicos, había sufrido un paro cardíac...

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Isabel S. M., de 58 años, que padece esquizofrenia, se entregó el pasado miércoles en una comisaría de Barcelona y se acusó de haber envenenado a su marido con barbitúricos. El presunto parricidio se cometió el miércoles en el domicilio familiar, situado en la urbanización Ca l"Estapé, de Lliçà d"Amunt, población situada a unos 30 kilómetros al norte de Barcelona. La mujer se entregó horas después de fallecer su marido, Antonio Torres Pereira, también de 58 años.Torres fue trasladado al hospital de Granollers en estado grave. Según explicó su esposa a los médicos, había sufrido un paro cardíaco mientras hacía footing, deporte que practicaba asiduamente. Pese a los esfuerzos de los médicos, la víctima falleció al poco de ingresar en el centro.

La mujer dijo a la policía que estaba arrepentida de lo que había hecho, que había envenenado a su marido y que después intentó ahogarle tapándole la cabeza con un cojín. En su confesión, añadió que el motivo de su proceder era que había visto en sueños a su suegra y que ésta le había dicho que le enviara a su hijo al cielo para poder estar de nuevo juntos. En un registro efectuado en la vivienda del matrimonio, la policía encontró gran cantidad de pastillas, entre ellas abundantes barbitúricos.

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