Tribuna:

El futuro, a debate

La Bolsa española estuvo ayer pendiente durante todo el día del futuro, sobre todo en su versión financiera. En las conversaciones se entrecruzaban términos como vencimiento y legislatura, sin que nadie tuviera mayor interés en aclarar a cuál de ellos se refería en su disertación. Así, la Bolsa bajaba porque los inversores apostaban por la siguiente legislatura, pero la diferencia entre unos y otros —podían ser contratos— tampoco justificaba el esfuerzo de mantener posiciones tanto tiempo.

Los dato indicaban que el contado, es decir, lo conseguido hasta ayer mismo, iba mucho...

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La Bolsa española estuvo ayer pendiente durante todo el día del futuro, sobre todo en su versión financiera. En las conversaciones se entrecruzaban términos como vencimiento y legislatura, sin que nadie tuviera mayor interés en aclarar a cuál de ellos se refería en su disertación. Así, la Bolsa bajaba porque los inversores apostaban por la siguiente legislatura, pero la diferencia entre unos y otros —podían ser contratos— tampoco justificaba el esfuerzo de mantener posiciones tanto tiempo.

Los dato indicaban que el contado, es decir, lo conseguido hasta ayer mismo, iba mucho mejor que el futuro a vencimiento inmediato y que el siguiente vencimiento —podía ser legislatura— aporta ventajas, aunque pequeñas. La cuestión es que la Bolsa española fue la única que bajó todo el día, aunque al final de la sesión Milán perdió pie y caía un 1,02%. Madrid cedió el 0,71%.

El próximo viernes es día hábil en el mercado español. Es ésta la primera vez que el nuevo calendario pactado por las cuatro bolsas se enfrenta a una sesión en festivo en Madrid y, por tanto, permanecerán cerrados el Banco de España y el mercado de deuda, dos referencias muy importantes para el mercado de valores.

Lo fundamental de este día, y que ayer tuvo una especial importancia en la Bolsa, es que se producirá el vencimiento de los contratos de futuros de este mes, aunque parece que va a ser una jornada de transición al haber rotado la mayoría de las posiciones hacia el vencimiento de junio. Las posiciones abiertas para ese plazo superaban ayer limpiamente a las de mayo, lo que indica que casi todo está decidido en ese aspecto.

El mercado de deuda estuvo algo más activo, debido a los ajustes técnicos después de un movimiento brusco. La rentabilidad del bono a 10 años quedó en el 5,17% y el diferencial con Alemania seguía en 0,16 puntos, en medio de una gran confusión por la tendencia del mercado y las declaraciones de algunos responsables del Bundesbank.

[El mercado estadounidense se anotó de nuevo una considerable subida. El índice Dow Jones ganó 50,07 puntos (0,55%) y cerró en 9.211,84].

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