Tribuna:

El mercado se caldea

La entrada en juego del Banco Central Hispano, poniendo sobre la mesa un abultado fondo de maniobra; la escasez general de papel en el mercado, la subida del dólar y la reacción de Wall Street ante las cifras de empleo en Estados Unidos, fueron los argumentos que tuvieron ayer a mano los inversores para tomar una decisión antes del fin de semana.El dinero que aportaron no se acerca al récord del mercado, pero la ausencia de contrapartida se nota cada día más, multiplicando así el valor del dinero. Madrid se anotó la mayor subida del ejercicio, un 2,84%, apenas dos días después de registrar la ...

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La entrada en juego del Banco Central Hispano, poniendo sobre la mesa un abultado fondo de maniobra; la escasez general de papel en el mercado, la subida del dólar y la reacción de Wall Street ante las cifras de empleo en Estados Unidos, fueron los argumentos que tuvieron ayer a mano los inversores para tomar una decisión antes del fin de semana.El dinero que aportaron no se acerca al récord del mercado, pero la ausencia de contrapartida se nota cada día más, multiplicando así el valor del dinero. Madrid se anotó la mayor subida del ejercicio, un 2,84%, apenas dos días después de registrar la caída más fuerte.

La fortaleza del mercado queda un tanto empañada por este alarde de volatilidad, pero todo el mundo es consciente de que fuera de la Bolsa a lo más que puede aspirarse es a mantener el valor del dinero, ya que las comisiones empiezan a ser usurarias para los resultados que se obtienen a cambio.

El índice de la Bolsa de Madrid saltó al cierre por primera vez, con relativa facilidad, el nivel de los 800 puntos, un jalón como otro cualquiera, pero lleno del efecto psicológico de todas las cifras que tienden al redondeo. Los analistas se han visto obligados en los últimos días a presentar revisiones de sus planteamientos, lo cual ha depositado en el inconsciente colectivo cierta idea de paralelismo con el ejercicio anterior, en el que las revisiones de expectativas fueron una constante casi hasta el mes de diciembre.

Dejando a un lado la necesidad de los profesionales de fijarse metas, lo que los inversores deben tener claro es que su propia actitud, desechando cualquier activo en beneficio de la Bolsa, se está generalizando y que cada vez queda menos papel a disposición de los que llegan detrás. La situación a la que se llega es de alto riesgo, pero esto es algo que se suele olvidar cuando se acierta un par de veces, y este año ha sido muy fácil.

Wall Street también terminaba la semana con fuerza. Al cierre, había recuperado con creces el retroceso del día anterior. El índice Dow Jones registró un avance de 125,06 puntos (1,48%) y se situaba en 8.569,39, de nuevo claramente por encima de los 8.500 puntos.

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