GENTE

CARTAS AL TROTE

Cada día recorre al trote, más de veinte kilómetros por caminos, caleyes y senderos. Álvaro Zorzo Díaz es un cartero que reparte el correo de la parroquia de Celles, en el municipio de Siero, en la zona central de Asturias. Los vecinos lo ven pasar y dicen que vuela. Ha rechazado motorizarse, según ha declarado a La Nueva España, de Oviedo, "por los pinchazos y porque así no podría ordenar el correo entre un sitio y otro". Zorzo, de 43 años, estudió Psicología en la Universidad Complutense de Madrid e ingresó luego en Correos como cartero rural. Ahora empiezan a conocerle ...

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Cada día recorre al trote, más de veinte kilómetros por caminos, caleyes y senderos. Álvaro Zorzo Díaz es un cartero que reparte el correo de la parroquia de Celles, en el municipio de Siero, en la zona central de Asturias. Los vecinos lo ven pasar y dicen que vuela. Ha rechazado motorizarse, según ha declarado a La Nueva España, de Oviedo, "por los pinchazos y porque así no podría ordenar el correo entre un sitio y otro". Zorzo, de 43 años, estudió Psicología en la Universidad Complutense de Madrid e ingresó luego en Correos como cartero rural. Ahora empiezan a conocerle como el Pony Express de Celles. Tras clasificar las cartas en la oficina de Pola, camina un kilómetro para calentar músculos, y ya cerca del mediodía comienza su trote, a una velocidad media de 7,5 kilómetros a la hora, con la cartera de cuero al hombro y buscando atajos, hasta las dos y media. Terminada la jornada laboral, ducha rápida y nueva carrera para coger el autobús que le traslada a Oviedo, donde reside con su mujer y sus dos hijas. Y por la tarde estudia, pues le sigue interesando la psicología, y hasta señala que le, gustaría traducir a Proust del original-.

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