Quemada una furgoneta de la Diputación de Álava
Un grupo de personas no identificadas arrojó poco antes de las tres de la tarde de ayer un cóctel molótov a una furgoneta propiedad de la Diputación Foral de Álava y que se encontraba aparcada en la calle de Vicente Aleixandre, situada a las afueras de la capital alavesa y que no es la del mencionado organismo, por lo que se supone que estaba siendo utilizada por algún empleado para efectuar un servicio. No hubo ningún detenido.
Nadie resultó herido y los daños materiales fueron escasos en este nuevo lance de violencia callejera, según informó en un comunicado el Departamento de Int...
Un grupo de personas no identificadas arrojó poco antes de las tres de la tarde de ayer un cóctel molótov a una furgoneta propiedad de la Diputación Foral de Álava y que se encontraba aparcada en la calle de Vicente Aleixandre, situada a las afueras de la capital alavesa y que no es la del mencionado organismo, por lo que se supone que estaba siendo utilizada por algún empleado para efectuar un servicio. No hubo ningún detenido.
Nadie resultó herido y los daños materiales fueron escasos en este nuevo lance de violencia callejera, según informó en un comunicado el Departamento de Interior del Gobierno vasco.
Los bomberos acudieron rápidamente a apagar el fuego provocado en el vehículo, un Citroën C-15, y los agentes vascos acordonaron la zona durante una hora.
Los agresores, según Interior, colocaron el artefacto en la parte delantera exterior de la furgoneta, que estaba vacía en ese momento, aunque en principio se dijo que rompieron el cristal trasero para lanzar el cóctel molótov dentro. Interior confirmó también que se trataba de una botella con líquido inflamable y un petardo.
Un vecino avisó a la Ertzaintza del incidente una vez que se percató de que el automóvil estaba envuelto en llamas. La policía autónoma, después de llevárselo a un depósito de la Diputación, descartó que se hubiera utilizado explosivo alguno en el ataque. No obstante, los agentes mantuvieron cerrada la zona durante una hora aproximadamente para comprobar que no había ninguna trampa en el coche.