Muere un niño de 11 años en Valladolid tras una explosión de gas en su casa

Un niño de 11 años, Álvaro Gallego Sánchez, resultó muerto y su madre con heridas muy graves ayer en Valladolid como consecuencia de la explosión que sufrió la vivienda en la que habitaban. Al parecer, la deflagración fue provocada por una fuga de gas propano por causas que, por el momento, se desconocen.Álvaro Gallego vivía con su familia en una vivienda unifamiliar de la urbanización El Pichón, situada en el término municipal de Simancas, a 10 kilómetros de la capital vallisoletana.

El siniestro se produjo pasadas las 10.30 de la mañana de ayer, cuando Álvaro, otros dos hermanos y su ...

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Un niño de 11 años, Álvaro Gallego Sánchez, resultó muerto y su madre con heridas muy graves ayer en Valladolid como consecuencia de la explosión que sufrió la vivienda en la que habitaban. Al parecer, la deflagración fue provocada por una fuga de gas propano por causas que, por el momento, se desconocen.Álvaro Gallego vivía con su familia en una vivienda unifamiliar de la urbanización El Pichón, situada en el término municipal de Simancas, a 10 kilómetros de la capital vallisoletana.

El siniestro se produjo pasadas las 10.30 de la mañana de ayer, cuando Álvaro, otros dos hermanos y su madre, Belinda Sánchez, se encontraban en el interior de la vivienda. Como consecuencia de la explosión, el niño cayó desde el piso superior donde se encontraba su habitación. Álvaro fue rescatado por varios vecinos y trasladado inmediatamente al hospital Pío del Río Hortega de Valladolid. El pequeño falleció momentos después de su ingreso. Sus otros dos hermanos, Mónica e Íñigo, salieron ilesos de la casa, que resultó totalmente destruida por la explosión.

Belinda Sánchez, de 42 años, madre de los pequeños, fue evacuada al mismo centro sanitario que su hijo después de hora y media de trabajos para sacarla de entre los escombros. Belinda sufría "quemaduras de primer y segundo grado en el 60% de su cuerpo", según fuentes del hospital Pío del Río. Tras ser atendida por el Servicio de Cirugía Plástica y la Unidad de Cuidados Intensivos de este centro sanitario, fue traslaada ayer tarde a la Unidad de Quemados del Hospital Universitario de Getafe. Su estado es de pronóstico grave.

En el momento de la explosión, el padre no se encontraba en el domicilio familiar y al volver a la vivienda tuvo que ser asistido a causa de la fuerte impresión que le causó la noticia del suceso.

Según fuentes de la investigación, no se han determinado aún las causas de la explosión, si bien se especula con que pueda estar relacionada con las conducciones de gas propano. El gas llega hasta las casas de la urbanización desde un depósito colectivo que según los vecinos había sido inspeccionado la pasada semana.

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