El nuevo líder de Camboya somete a "reeducacion política" a sus prisióneros

Las fuerzas de Hun Sen consiguieron ayer el control de la mayor parte de la provincia de Siem Reap, al norte de Camboya, donde se habían hecho fuertes las tropas partidarias del príncipe Norodom Ranariddh. Ante un nuevo avance de los comunistas provietnamitas, los realistas retrocedieron 20 kilómetros. Cientos de ellos han sido apresados desde el pasado 6 de julio, cuando Hun Sen asumió el poder, y están siendo sometidos a "reeducación política y psicológica", según fuentes occidentales.

"El Funcinpec [partido realista de Ranariddh] ya no existe en la provincia de Siem Reap. Les hemos d...

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Las fuerzas de Hun Sen consiguieron ayer el control de la mayor parte de la provincia de Siem Reap, al norte de Camboya, donde se habían hecho fuertes las tropas partidarias del príncipe Norodom Ranariddh. Ante un nuevo avance de los comunistas provietnamitas, los realistas retrocedieron 20 kilómetros. Cientos de ellos han sido apresados desde el pasado 6 de julio, cuando Hun Sen asumió el poder, y están siendo sometidos a "reeducación política y psicológica", según fuentes occidentales.

"El Funcinpec [partido realista de Ranariddh] ya no existe en la provincia de Siem Reap. Les hemos dado alcance, y no creo que vuelvan", declaró el general Uy Sopheap, comandante de las fuerzas de Hun Sen en el frente.Fuentes occidentales han informado de que al menos tres veteranos dirigentes del Funcinpec han sido ejecutados por las fuerzas de Hun Sen: el secretario de Estado para Interior, Ho Sok; el oficial de Inteligencia Chao Sambath y el subsecretario de Estado para Defensa, Krouch Yoeum.

Según estas fuentes, varios cientos de soldados han sido arrestados y llevados a tres centros de detención, donde no reciben alimentos. Todos fueron capturados por patrullas durante y después de los dos días de combates en la capital, el 5 y el 6 de julio. La policía ha declarado que ahora se encuentran bajo "reeducación política y psicológica", según estas mismas fuentes.

Hun Sen, sin embargo, intenta dar una imagen de normalidad tras derribar del poder a su compañero de coalición, el primer primer ministro Ranariddh. Ayer, en un nuevo discurso, el segundo primer ministro hizo un llamamiento a la celebración de elecciones libres y justas en Camboya, aunque no dio ninguna fecha.

"Le preocupa el reconocimiento y la legitimidad", declaró un analista político camboyano. "No quiere repetir el aislamiento de los ochenta". En aquella época, tras la derrota de los jemeres rojos por parte del Ejército vietnamita, Hun Sen encabezó un Gobierno pro Hanoi que apenas fue reconocido por un puñado de países de la órbita soviética.

El rey de Camboya, Norodom Sihanuk, que se encuentra en tratamiento médico en Pekín, pidió ayer desde la capital china a Hun Sen que respete la Constitución y todos los acuerdos internacionales firmados por Camboya. El rey Sihanuk es padre del depuesto Ranariddh.

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