Precario
La Bolsa española superó una vez más sus anteriores máximos históricos, pero en esta ocasión sin contar con el apoyo decidido del dinero. La contratación fue de 143.557 millones de pesetas efectivas, la tercera en importancia del año, pero un 40%, unos 57.000 millones, llegaron en forma de aplicaciones, operaciones bilaterales fuera del mercado que no influyen en la formación de los precios.Una de las razones de la velocidad de subida de las bolsas europeas está en la posibilidad de que se llegue a un acuerdo rápido sobre el pacto de estabilidad, pero ayer pesaba más la apertura al alza de Wal...
La Bolsa española superó una vez más sus anteriores máximos históricos, pero en esta ocasión sin contar con el apoyo decidido del dinero. La contratación fue de 143.557 millones de pesetas efectivas, la tercera en importancia del año, pero un 40%, unos 57.000 millones, llegaron en forma de aplicaciones, operaciones bilaterales fuera del mercado que no influyen en la formación de los precios.Una de las razones de la velocidad de subida de las bolsas europeas está en la posibilidad de que se llegue a un acuerdo rápido sobre el pacto de estabilidad, pero ayer pesaba más la apertura al alza de Wall Street. Un par de datos reforzaron la idea de que el crecimiento económico se está frenando en EE UU: la caída de las ventas al por menor en mayo, por tercer mes consecutivo, y el aumento de las peticiones de subsidio de desempleo.
El mercado neoyorquino casi se embaló. Cerró en su quinto máximo consecutivo, 7.711,47 puntos, con una ganancia de 135,64 (1,79%), después de haber saltado en una sola jornada las barreras de 7.600 y 7.770 puntos. Los analistas empiezan a buscar apresuradamente fecha para la superación de los 8.000.
La evolución de los precios de la deuda en España alcanzó récords. A 10 años quedó en el 6,43%, el nivel más bajo jamás alcanzado. El diferencial con la deuda alemana se mantenía en 0,72 puntos, ya que las expectativas de un acuerdo sobre el euro están beneficiando a todos.