Cartas al director

ONU y derechos humanos

Releo el artículo de Vicenç, Fisas Los secretos de la ONU, publicado el pasado 13 de diciembre, y no puedo creer que sea cierto. No puede ser cierto que desde entonces no se haya vuelto a cuestionar la decisión de la ONU de silenciar y evitar la divulgación pública del llamado informe Machel sobre los delitos contra los derechos humanos cometidos por los cascos azules en las misiones de paz. Imagino pertenecer a uno de tantos países en guerra. Imagino ver a mis familiares y amigos morir víctimas de los enfrentamientos armados. Imagino sufrir en mi propio cuerpo las consecuencias...

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Releo el artículo de Vicenç, Fisas Los secretos de la ONU, publicado el pasado 13 de diciembre, y no puedo creer que sea cierto. No puede ser cierto que desde entonces no se haya vuelto a cuestionar la decisión de la ONU de silenciar y evitar la divulgación pública del llamado informe Machel sobre los delitos contra los derechos humanos cometidos por los cascos azules en las misiones de paz. Imagino pertenecer a uno de tantos países en guerra. Imagino ver a mis familiares y amigos morir víctimas de los enfrentamientos armados. Imagino sufrir en mi propio cuerpo las consecuencias de tales enfrentamientos. Pero lo que me es más difícil de imaginar es la intensidad de los sentimientos de horror e impotencia que experimentaría al ver cómo personas neutrales que intervienen con la misión específica de ayudarme y protegerme en lo posible concentran y dirigen su odio y su crueldad contra mí, agrediéndome y facilitando la agresión a otros, sin tener yo la posibilidad de defenderme (tanto in situ como, por lo visto, a posteriori). No puedo olvidar que hayan podido cometerse semejantes atrocidades y por eso solicito a quien corresponda información sobre qué investigaciones y qué medidas se han adoptado para sancionar tales comportamientos.-

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