Una enferma mental mata puñaladas a su hijo de ocho meses en Mallorca

Elisabeth Schmidt, una austriaca de 38 años residente en Mallorca, mató ayer de cinco cuchilladas a su hijo de ocho meses, Andrea, e intentó luego quitarse la vida cortándose las venas y arrojándose desde una terraza a cuatro metros de altura. La mujer, que estaba en tratamiento psiquiátrico, sufrió una crisis tras discutir con su esposo, el español José María Palou, de 68 años.

Los hechos ocurrieron en los apartamentos Holifay Center que regenta Palou en Calviá. Según fuentes familiares, Elisabeth sufrió una crisis tras discutir con su esposo. Las mismas fuentes señalaron que la mujer ...

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte

Elisabeth Schmidt, una austriaca de 38 años residente en Mallorca, mató ayer de cinco cuchilladas a su hijo de ocho meses, Andrea, e intentó luego quitarse la vida cortándose las venas y arrojándose desde una terraza a cuatro metros de altura. La mujer, que estaba en tratamiento psiquiátrico, sufrió una crisis tras discutir con su esposo, el español José María Palou, de 68 años.

Los hechos ocurrieron en los apartamentos Holifay Center que regenta Palou en Calviá. Según fuentes familiares, Elisabeth sufrió una crisis tras discutir con su esposo. Las mismas fuentes señalaron que la mujer estaba sometida a tratamiento psiquiátrico a causa de una enfermedad mental de tipo paranoide.La madre acudió con su hijo a las once de la noche al citado establecimiento de la zona de Santa Ponça y pidió un bocadillo y un cuchillo para partirlo. Luego entró en un baño de la primera planta y acuchilló hasta cinco veces al pequeño. Una de las puñaladas atravesó el corazón del crío.

La infanticida se encaró entonces con sus familiares y les comunicó lo que había hecho. Éstos subieron rápidamente y encontraron al bebé agonizando. Elisabeth, sola, intentó suicidarse cortándose las venas y lanzándose desde la terraza. Sufrió una rotura en un pie y contusiones en las vértebras.

La policía local del Calviá relató ayer que hallaron el cuerpo de Andrea envuelto en una toalla sobre un charco de sangre. Los esfuerzos para reanimar al crío fueron inútiles.

La Guardia Civil llevó a Elisabeth al hospital de Son Dureta, donde un psiquiatra constató que su estado hacía imposible su interrogatorio. Allí, la mujer explicó que había matado al niño para librarle de unos monstruos de Internet que lo perseguían. Quedó ingresada bajo vigilancia a la espera de la decisión del juez.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En